01 Febrero de 2025 19:02
La movilización multitudinaria en defensa de los derechos del colectivo LGTBIQ+ y en repudio al discurso del presidente Javier Milei en el Foro Económico de Davos ya tuvo su primer impacto político: el Gobierno nacional detuvo el avance del proyecto de ley que buscaba eliminar la figura de femicidio del Código Penal. Así lo aseguró la dirigente de izquierda Manuela Castañeira, quien participó activamente en la Marcha Federal del Orgullo Antifascista y Antirracista. "El solo llamado a la movilización de hoy hizo retroceder al gobierno de Milei. Acaban de frenar el proyecto de ley 'Igualdad ante la Ley', cuyo eje principal era sacar la figura de femicidio", expresó Castañeira en sus redes sociales, marcando un hito en la lucha feminista frente a la embestida del oficialismo contra las políticas de género.
Desde la llegada de Javier Milei a la Casa Rosada, el Gobierno viene impulsando un discurso que busca desmantelar normativas que garantizan derechos conquistados en materia de género. En ese marco, el oficialismo había anunciado la intención de enviar al Congreso un proyecto para eliminar lo que denomina "discriminación positiva", incluyendo la eliminación de la carátula de femicidio. Este planteo generó un fuerte rechazo en distintos sectores de la sociedad, que consideran fundamental mantener esta figura legal debido a la especificidad de la violencia de género y su impacto en la realidad argentina.
Según los datos relevados por organizaciones feministas, en lo que va del 2024 se han registrado 29 femicidios, casi uno por día, y 49 intentos de femicidio. La masiva convocatoria en la Marcha Federal del Orgullo Antifascista y Antirracista demostró el peso de la organización social en la resistencia contra las políticas del gobierno de Milei. Castañeira enfatizó que "a este gobierno de ultraderecha se lo frena en las calles" y llamó a seguir movilizándose en defensa de los derechos de las mujeres y las disidencias.
La jornada de protesta no solo expresó un repudio a las declaraciones del presidente en Davos, donde vinculó a la diversidad sexual con la pedofilia, sino que también mostró la capacidad de respuesta de los sectores feministas y de la diversidad frente a los intentos de retroceso en materia de derechos humanos. Si bien el gobierno decidió frenar el proyecto, el riesgo de que estas iniciativas regresen sigue latente. La reacción ciudadana dejó en claro que cada intento de vulnerar derechos será respondido con la misma contundencia: las calles, una vez más, son el principal escenario de la resistencia.