El auge de la alimentación natural le abrió paso a una revalorización de ingredientes ya olvidados, que están vinculados a las cocinas étnicas y ancestrales. Una de las alternativas de moda es el Ghee, una materia prima usada en la medicina ayurveda, que forma parte de las recetas hindúes y paquistaníes y que poco a poco, ganó un lugar dentro del fenómeno de la "nutrición consciente".
Ghee, la mantequilla clarificada.
Entre sus múltiples beneficios, el ghee brinda una grasa nutritiva, de fácil digestión y con muchas propiedades terapéuticas. Este aceite es una fuente de vitaminas liposolubles A, D, E, y K. Sus células tienen una función antioxidante, regulan la actividad neuronal y la absorción de minerales en el intestino. Además, participan en procesos de fertilidad y hormonal.
A su vez, colabora en la regulación de la flora bacteriana y estimula la evacuación. Por su alto contenido en ácido láurico, tiene propiedades antivirales y antifúngicas. Como si fuera poco, posee cualidades antiinflamatorias y desintoxicantes. Está recomendado para problemas de digestión e intestino irritable.
Su consumo dentro de un plan de alimentación saludable no aumenta el colesterol. IMPORTANTE: Al ser rico en grasas saturadas, debe consumirse con moderación (la porción dependerá de cada persona).
RESUMEN TEÓRICO-PRÁCTICO SOBRE EL GHEE
¿De qué se trata?
Es una variedad de manteca clarificada que, en su proceso de elaboración, se mejora la calidad del agua y se elimina la lactosa y la caseína, las sustancias que causan intolerancias.
¿Para qué se usa?
Este producto se puede utilizar para engrasar budineras, fuentes o placas, tanto en preparaciones dulces como saladas y reemplaza otras materias grasas, ya sea manteca o cualquier tipo de aceites.
Además, si se lo administra en pequeñas dosis junto con los alimentos también fortalece y nutre la alimentación cotidiana: suele añadirse para acompañar cereales, legumbres, hortalizas y verduras cocidas. También, en estado sólido, puede ser untado como la manteca común.
Para estreñimiento se suele tomar con un vaso de leche y una cucharadita de café de ghee antes de ir a dormir.
¿Dónde se consigue?
Esta manteca se puede comprar en dietéticas, almacenes naturales y mercados naturales online más completos ofrecen esta opción. El consejo para elegir es que sea un producto elaborado con leche de vacas de pastura. De esta forma, el aporte nutricional será mayor.
¿Cómo prepararlo?
El proceso es simple, pero demanda atención.
Colocar la manteca (conviene que sea un producto de un establecimiento pastoril), en una olla mediana destapada, calentar a fuego mínimo revolviendo suavemente con cuchara de madera.
Observar y retirar la espuma blanca a medida que va apareciendo. Continuar el proceso mientras hierve la manteca, se va evaporando el agua y los sólidos lácteos. Para evitar que se pegue, es importante ir removiendo.
El contenido se volverá más traslucido y su textura será más densa. Luego observará burbujas grandes. Esto indica que el ghee está listo.
Colar, y colocar en frasco de vidrio. Esperar a que se enfríe para tapar y guardar en una alacena. No es necesario refrigerar.