por Agustin Gulman
12 Marzo de 2017 20:29
Más de once horas en la ruta, una ciudad sin señal, avalancha y el condimento trágico de dos muertes absurdas que se pudieron haber evitado. “Debió haber sido una fiesta”, describe Santiago Spaltro, una de los más de 250 mil fieles que viajaron a Olavarría a la misa ricotera.
En diálogo con BigBang, relata cómo fue el show y criticó la organización: “Vi poca gente de seguridad, pudo haber más fallecidos”.
“El lugar no tenía las instalaciones adecuadas, la ruta tampoco, había pocos baños y estaba todo embarrado. Había un mal clima desde el principio, el show empezó tarde y estaba muy tenso”, critica Spaltro. “Se veía que pasaban cosas raras, el Indio estaba muy agitado y se veía gente desmayada, hubo empujones y una avalancha por la gente que entró después”, remarca.
Spaltro fue al show del Indio Solari y describió que fue caótica la salida del predio La Colmena.
Spaltro estaba a unos 150 metros del escenario y aunque no pudo observar con detalle cómo fue el momento de la avalancha, sí describe que “se escuchaba que algo raro pasaba”. Pero además, recuerda que durante la semana ya habían existido alertas del propio Solari a través de Virumancia, la página de Facebook que administra su pareja. “Ni Defensa Civil ni la seguridad actuaron como corresponde”, cuestiona Spaltro.
- Se dijo que había unas 1.300 personas de seguridad. ¿Los viste?
Vi poca gente, no es sencillo meter a 1.300 personas de seguridad, aunque lo ameritaba, porque hacía falta. Había demasiada gente y pocos para cuidarnos. Vi gente subida a un terraplén, un peligro, también sobre los baños químicos. Fue una tragedia, pero debería haber sido una fiesta.
Según Spaltro, se sentía un mal clima desde el inicio del show.
- Se habla de al menos dos personas fallecidas. ¿Pudieron ser más?
Espero que no, pero pudo haber más muertos, pudo haber sido mucho peor, había pocas salidas y estaban mal organizadas. Una estaba tapiada con madera, no se podía pasar y derivaban a la gente hacia otra puerta. Todo el mundo se agolpó después del último tema, Mi perro dinamita. Hubo media hora de empujones, ahí pudo haber otra avalancha. Fue todo desastroso.
LA MISA RICOTERA EN NÚMEROS
Spaltro gastó entre 2.000 y 2.200 pesos en la misa ricotera. A los $800 de la entrada, le debió sumar el viaje en micro, de otros $900. De todos modos, dependiendo el lugar de salida, el precio de cada pasaje varía. Aunque incluía la estadía durante todo el sábado en un camping cercano, por la demora que había para acceder a Olavarría, hubo miles de personas que ni lo utilizaron.
Según Spaltro, anoche en Olavarría había cerca de 300 mil personas.
A eso, se deberá sumar el gasto en comida durante un día que sería largo. Pero inclusive eso tuvo mala organización. Spaltro cuenta que los vecinos de la ciudad sacaron a las calles las parrillas de sus casas para vender comida, pero que el abastecimiento no fue suficiente.
La cifra de espectadores tampoco es un dato para nada menor. Esta mañana el intendente Ezequiel Galli señaló en conferencia de prensa que esperaban 170 mil fanáticos. Semanas atrás, desde el Municipio habían explicado a BigBang que la organización esperaba unas 200 mil. Ese era el tope al que estaba habilitado el predio La Colmena.
Vacío. El predio tenía capacidad para 200 mil personas, pero aseguran que fueron más.
Pero la cifra fue mayor. Hay quienes hablan de 300 mil. Es que el Indio, dicen los que fueron a más de un show, tiene una política clara: si empezó el recital, nadie quedará afuera por no tener entrada. El municipio esperaba, además, recaudar el 2 por ciento por la venta de tickets, una cifra que estimaban cercana a los dos millones de pesos.
Para Spaltro, la organización del show fue desastrosa.
- Fuiste a otros recitales del Indio, ¿cómo comparás la organización de los shows?
Creo que esta fue la peor. En Tandil pudo haber pasado esto, tampoco estaba bien organizado, pero fue mejor que acá y fue una fiesta, sólo lo pararon por gente que tiraba zapatillas al escenario. Este año también tiraron cosas, pero no tanto como el año pasado. En Tandil hubo clima de fiesta, había mejor preparación de las salidas, te podías ir por varias calles. Acá se formó un embudo, todos hacia una misma avenida.
- ¿Volverías a ir a un recital del Indio?
Uno al gustarle la música quiere ir, es como una redención, para que sea una fiesta, tenemos que aprender, más allá de la responsabilidad institucional. Me quedé con ganas de ver una fiesta. Me genera dudas que pueda volver a tocar, se creía que iba a ser el último porque anunció la enfermedad. Ayer dijo que no tenía más ganas de esto, más allá de la enfermedad. No tiene más ganas de ver estos problemas y se entiende, es difícil porque la gente se está muriendo a cinco metros del escenario. En caliente pensaba que era irresponsable seguir con el show, pero a la larga creo que fue mejor, porque si paraba el recital al tercer tema se iba a poner violenta la situación.
