22 Septiembre de 2016 10:11
Noche, drogas, alcohol, quinta en Moreno, fiesta ilegal, peleas, todos contra todos, armas. Y todo organizado por siete adolescentes de entre 15 y 19 años, los encargados de convocar a la gente a la fiesta “Proyecto XXX”, donde un adolescente recibió una bala en el pecho y terminó muerto.
La Quinta donde se realizó la fiesta.
Según publicó Infobae, los organizadores de la fiesta trágica declararon ante la Justicia y sostuvieron que su objetivo “nunca fue ganar dinero” y que por eso no cobraron entrada. Además, dijeron que alquilaron la quinta de Moreno para una fiesta privada y que jamás imaginaron que iba a ir tanta gente.
Según manifestaron ante el juez,la seguridad dentro de la quinta y en la entrada estuvo a cargo de padres y familiares que " no cobraron un peso", al igual que el encargado de pasar música.
Nicolás Rivero, el joven de 19 años que murió en la Proyecto XXX
Y por último, pese a que hay registros en redes sociales en donde convocaran a una fiesta de "alcohol, armas y drogas", dicen que no vendieron ni alcohol ni drogas durante el evento.
"No ropa deportiva, no armas, no botellas de vidrio, no problemas, van a ver sorpresas para nuestros amigos", dijeron que era la consigna de la invitación, donde además se solicitaba a los concurrentes "sólo debían llevar lo que tomarían durante el transcurso del evento".
Las contradicciones que le cortan las piernas a la verdad
La versión que dieron los organizadores de la fiesta trágica y maldita contrasta no sólo con la versión de los testigos y concurrentes sino con todo lo publicado sobre Proyecto XXX antes, durante y después en las redes sociales, donde siempre se promovió como un evento masivo.
Varios testigos afirmaron que es mentira que no se haya cobrado entrada, que no se haya vendido alcohol y que la fiesta haya sido pensada para ser un evento íntimo y nada masivo.
Otros testigos comentaron que en el interior de la fiesta había jóvenes que portaban armas de puño y navajas, con lo que también se rebaten las palabras de los organizadores que afirmaron el tono pacífico de la consigna.
Durante el peritaje aparecieron puñales, facas caseras, barras de fierro, picanas, botellas y piedras. También encontraron balas de revólver y vainas de pistolas de distintos calibres.