El canillita Carlos Manduca fue asesinado esta madrugada de dos disparos, uno de ellos en la cabeza, cuando un grupo de delincuentes intentó robarle mientras realizaba, en su camioneta, el habitual reparto de diarios en la localidad bonaerense de Caseros, en el partido de Tres de Febrero.
Carlos Manduca fue asesinado de dos disparos por tres ladrones.
Según quedó registrado en un vídeo de una cámara de seguridad que grabó el trágico momento, lo que ocurrió es que Manduca intentó resistir el asalto, y forcejeó durante algunos segundos con los ladrones, lo que provocó que uno de ellos lo baleara.
El hecho se registró cerca de las 5 de la mañana, cuando la víctima cargaba algunos diarios en su camioneta para realizar el reparto. En ese momento, fue sorprendido por tres delincuentes, quienes rodearon al canillita para sacarle su camioneta.
En ese contexto, Manduca intentó detener a los agresores, cayó al suelo, y finalmente ya acostado en el piso, uno de ellos lo baleó en la cabeza.
Tras disparar, los agresores se subieron a la camioneta de su víctima, aunque antes de huir, uno de ellos regresó para revisar el cuerpo de Manduca: quería saber si todavía le quedaba algo más para robarle.
Los asaltantes huyeron en el vehículo del canillita y, a las pocas horas, abandonaron la camioneta prendida fuego en Fuerte Apache, para luego huir.
Hasta el momento, todos los implicados permanecen prófugos y son intensamente buscados por la policía, por lo que en la tarde de este jueves, los vecinos y familiares marcharán hacia la Municipalidad de Tres de Febrero para pedir justicia.
Marcelo Manduca, hermano de Carlos, explicó que al diariero le dispararon "estando en el piso, como cobardes". "Sin mediar palabra me arrebataron la vida de mi hermano", dijo angustiado en diálogo con TN.
El hermano de Carlos se lamentó al asegurar que Manduca había forcejeado con los ladrones y que, por ese motivo, se había caído al suelo. "Fue un hecho fortuito, es una locura lo que se vive, hay patrulleros en la calle y hay presencia policial en el municipio, pero justo hacía cinco minutos había pasado uno por donde estaba mi hermano", explicó.
Manduca perdió la vida en el acto.
El hombre de 49 años tenía dos hijos mayores de edad y una nena de 8 años. Antes había pertenecido a la Policía Federal, aunque hace más de 20 años decidió dejar la fuerza para continuar con la tradición familiar de ser diarero.
Seis horas antes de este tremendo episodio y a sólo 25 cuadras del lugar, un hombre de 51 años fue asesinado a balazos cuando delincuentes intentaron robarle el auto mientras llegaba a su casa ubicada en José Ingenieros.