El diputado salteño Alfredo Olmedo presentó hace algunas semanas un proyecto de ley, el cual fue girado a la comisión de Legislación General, que tiene como objetivo regular la labor de "Peluqueros y Peinadores" en todo el país.
Acompañado por el famoso estilista Fabio Cuggini, ambos buscan que con esta iniciativa se respete, entre otras cosas, "el secreto profesional" y la contratación de un seguro de caución.
Alfredo Olmedo y Fabio Cuggini presentaron un proyecto para regular el oficio de la peluquería.
"Vienen clientes que no quieren demostrar que se hacen la tintura, y no podés hablar por ahí si no tenes su consentimiento", sostuvo con firmeza Fabio Cuggini en diálogo con BigBang.
"Esto es como un hotel cinco estrellas. Si el dueño del hotel alojamiento te dice quien entró, ¿eso está bien?", preguntó el peluquero, al mismo tiempo que aclaró que el proyecto tiene muchos otros puntos importantes, como es el caso de la necesidad de un seguro "para los empleados" del lugar y la intención de que sea obligatoria "una matrícula" para ejercer.
"Hoy te podés contagiar sida o hepátitis, y por eso estoy peleando para que le profesión se matricule. Olmedo, apareció en escena hace poco, cuando hice una protesta en la calle después de que desde el Gobierno de la Ciudad me clausuraran el local porque los empleados no tenían libreta sanitaria", explicó.
Cuggini y Olmedo hicieron una protesta en la vereda de la peluquería del famoso estilista.
Lo cierto, es que el proyecto tiene 120 artículos en los que se sostiene que la persona, para poder ejercer el oficio, deberá "poseer el título correspondiente conforme a la reglamentación homologada por el Colegio Público de Profesionales", sin dejar de lado la importancia de prohibirle a los profesionales aplicar procedimiento nocivos para la salud.
"Es un oficio digno que se tiene que convertir en profesión, porque usamos objetos cortantes. Si te arañamos tiene que haber un seguro. Este proyecto va a determinar si el empleado está capacitado para usar elementos cortantes, si sabe o no lo que hace", explicó Cuggini.
Cuggini sostiene que los empleados y los cliente están expuestos a contagiarse enfermedades.
A su vez, los peluqueros tendrán vedado realizar prácticas terapéuticas “de exclusiva competencia médica”, así como “ejercer la profesión sin previa matriculación".
En relación a esto, la iniciativa plantea que los trabajadores lleven a cabo su labor sin enfrentarse al riesgo de infectarse con un cuadro infecto-contagioso, al mismo tiempo que se evite manipular químicos “sin debida protección”.
Cuggini, sostuvo que su experiencia en la profesión lo ayudó a reconocer muchos errores habituales que se cometen en el día a día, los cuales ponen en riesgo la salud del cliente y del empleado, por lo que en 2013 él le comentó a Cristian Ritondo los problemas que ocurren, y ocurrían en ese entonces en la peluquería, y juntos presentaron un proyecto ante la Legislatura.
Cuggini presentó un proyecto en 2013 con la ayuda de Cristian Ritondo.
"Nos agarró la vorágine de las elecciones, llegaron Horacio Rodríguez Larreta y Diego Santilli y pensé que ellos lo iban a acelerar. Pero todos quieren llegar al poder y es más importante inaugurar una estatua de Lionel Messi, que cagarse en la gente. Estos muchachos no tienen ni noción de lo que pasa en las peluquerías", dijo sobre la iniciativa que quedó trunca.
"En la Legislatura con Ritondo, el proyecto llegó a comisión y me di cuenta que los asesores trabajan para su jefe y la cuota mensual. En vez de construir, piensan sólo en su propio beneficio", se quejó.
Finalmente, consultado ante la cantidad de peluquerías que existen hoy en la Argentina, Cuggini sostuvo: "Hoy no se sabe porque todo el mundo pone una peluquería. Está todo disfrazado y cualquiera puede ser peluquero, así que con ese criterio puedo ponerme a cortar en la vereda".