Un hecho insólito y muy peligroso ocurrió el jueves por la noche, cuando un hombre fue "atacado" -según el primer parte policial- por una Yarará adulta de más de un metro de largo, un ejemplar venenoso, en el barrio porteño de Retiro. La víctima, que está fuera de peligro, fue trasladada de urgencia al Hospital Rivadavia y no presenta heridas de ningún tipo o infección por veneno, mientras que el animal fue encontrado muerto.
Si bien los miembros de seguridad que trasladaron al hombre notaron una especie de mordedura en uno de sus dedos, la víctima señalo que aquella herida se la había hecho con un hierro. El ataque ocurrió a las 20, a pocos metros de la esquina de Libertad al 1600. Si bien el primer reporte policial señalaba que el hombre había sido mordido por el animal, esto fue descartado más tarde.
El hombre se encuentra en situación de calle y por seguridad fue trasladado de urgencia para ser atendido en el Hospital Rivadavia, donde fue examinado y dado de alta a las pocas horas. Las autoridades señalaron que la serpiente superaba el metro de largo y al encontrarla ya estaba muerta, por lo que fue enviada al Instituto Malbrán para su estudio.
Al mismo tiempo, se inició una investigación para determinar cómo fue que la Yarará terminó en la zona de Retiro, ya que los especialistas señalaron que si bien existen estos ejemplares adultos en la zona de la Reserva Ecológica, advirtieron que es casi imposible que logren salir de la misma con facilidad.
De hecho, se sospecha que el animal, que llega a tener una longitud promedio de entre 80 y 120 centímetros y que se encuentra en regiones de la Argentina, Paraguay, Uruguay y Brasil, se encontraba como “mascota” de algún vecino de la zona de Retiro, situación que está prohibida y penada por la ley.
Si bien no se trata de una especie agresiva, no duda en atacar si se siente bajo amenaza. En 2019, la Secretaría de Salud de la Nación informó que unas 700 mordeduras de serpientes se producen en la Argentina cada año, de las cuales entre un 80 por ciento y 90 por ciento se atribuyen a serpientes Yararás.
En caso de recibir un ataque de este animal, o algún otro de la clase venenoso, es de suma importancia acudir rápidamente al centro médico más cercano dado que la mayoría de los nosocomios cuenta con suero antiofídico para recibir el tratamiento adecuado.