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Invasión: las 4 claves para saber si un alacrán es venenoso o no

La aparición de escorpiones en Palermo y Recoleta alertó a todo Buenos Aires. A través de su color, la forma de su cuerpo y de sus pinzas se podrá identificar a la especie.

19 Enero de 2017 13:22
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Tras el caso de niños picados por alacranes en plena ciudad de Buenos Aires, el temor y la psicosis caló entre los porteños. Sobre todo porque la mayoría de los accidentes con estos arácnidos se producen en el hogar.

La variedad Titius Trivittatus es la que se pudo ver en Buenos Aires.

Sin embargo no todos los alacranes son iguales, ni tampoco venenosos. Por eso más allá de las medidas de prevención que se pueden tomar es importante reconocerlos.

Existen diferentes clases de alacranes o escorpiones venenosos que se pueden encontrar en la Argentina y tienen pequeñas variaciones que permiten identificarlos.

Diferencias. Fuente: Ministerio de Salud de la Nación.

Los alacranes también existen en Córdoba, La Rioja, Tucumán y en la Mesopotamia. La especie que apareció en Palermo es conocida como Titius Trivittatus, una de las más agresivas y peligrosas.

Alacranes venenosos:

Son de color amarillo o marrón claro.

El cuerpo del escorpión puede presentar líneas en el cuerpo o el dorso en color marrón.

Su pinzas son delgadas y largas.

En el telsón presentan un apéndice.

Alacranes no venenosos:

Su color va del marrón oscuro a negro.

El dorso siempre es del mismo color que el cuerpo.

Sus pinzas son pequeñas y cortas.

El telsón no tiene apéndice.

Precauciones básicas.

Los alacranes que se pudieron ver en Palermo y Recoleta son una plaga de hembras que salen a cazar insectos, especialmente cucarachas, y que en verano se muestran más activas. Por eso las medidas de prevención deben estar orientadas a evitar el ingreso de los insectos a la casa.

Medidas de precaución

Revisar y sacudir prendas de vestir, y calzados.

Sacudir la ropa de cama antes de acostarse.

Tener precaución cuando se examinan cajones o estantes.

Evitar caminar descalzo en zonas donde se conozca la presencia de alacranes.

Utilizar rejillas sanitarias en desagües.

Controlar las entradas y salidas de cañerías, aberturas y hendiduras.

Colocar burletes o mosquitero en puertas y ventanas.

Revocar las paredes, reparar grietas en pisos, paredes y techos.

Controlar de cámaras subterráneas, cañerías, sótanos, huecos de ascensor y oquedades de las paredes

Evitar acumulación de materiales de construcción, escombros o leña.

Frente a eventuales picaduras, sólo aplicar hielo y consultar rápidamente al médico. En lo posible llevar el escorpión para ser identificado.