Cerca de las 12 del mediodía Tiziano Gravier ingresó al quirófano del Hospital Universitario Austral donde los médicos lo operaron de la fractura en su mandíbula, la cual se produjo el fin de semana tras ser atacado por dos jóvenes en la puerta de un boliche en Rosario.
El joven primero fue llevado de urgencia por sus padres a un centro de salud en la ciudad, aunque finalmente lo trasladaron hasta Buenos Aires, donde quedó internado en el Austral.
"Estoy llegando al hospital en donde lo van a intervenir quirúrgicamente por este hecho vandálico impresionante que no entendemos todavía", dijo esta mañana Alejandro Gravier, el padre del joven y el esposo de Valeria Mazza, quien dialogó con el programa ¿Y ahora quién podrá ayudarnos? de Radio con vos.
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Antes de que Tiziano entrara para ser operado, comentó que iban a tener que ponerle anestesia general y que luego tienen que ver como va a ser la recuperación, la cual ya le adelantaron que no será nada sencilla. "Él es un atleta de alto rendimiento, está en el equipo nacional de esquí, y ellos verán la recuperación que tendrá que hacer", sumó su papá.
"A medida que va pasando el tiempo vos vas cayendo sobre la situación que vivimos y la verdad es que una tristeza enorme. Te quedan miedo, bronca y tristeza, son muchas sensaciones juntas", se sinceró Gravier, quien admitió que no saben por qué los agresores atacaron a Tiziano, ya que casi no hubo un diálogo previo entre los implicados.
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Por otro lado, el marido de Mazza aseguró que este es un día difícil para toda la familia, y que lo van a pasar unidos. "¿A dónde hemos llegado como sociedad? ¡Qué tristeza en dónde estamos! Nos pueden decir lo que nos digan pero los hechos nos llevan puestos. Me da una tristeza enorme que culturalmente estemos donde estemos y que se generen estos hechos", se lamentó.Además, dijo que si bien en este caso se trató de su hijo, en realidad pudo haberse tratado de cualquier joven que estuviera en ese boliche. "Ellos no apuntaron al hijo de Valeria Mazza y Alejandro Gravier, podría haber sido el hijo de cualquiera. ¡Es una barbaridad que esto esté pasando!", cerró indigando.