Desde el 10 de diciembre de 2023, la universidad pública sufre la embestida libertaria de la mano del presidente Javier Milei que parecería tener el deseo desea poner fin a la universidad pública. Debido al bajo sueldo de los docentes universitarios, este martes 20 de agosto, comienza un nuevo paro de 48 horas.
A través de la cuenta oficial de X, la Federación Nacional de Docentes, Investigadores y Creadores Universitarios anunció: "El plenario de Secretarias Generales de CONADU Histórica definió continuar las acciones de protesta por la recuperación real del salario y en el marco de la unidad con el Frente Sindical de Universidades Nacionales".
En el mismo comunicado, el CONADU explicó a la situación que se enfrentan. Con una última reunión paritaria, que se realizó el pasado 9 de agosto, el Ministerio de Capital Humano "volvió a repetir la táctica" impulsando un 3% de incremento salarial para el corriente mes y un 2% para septiembre. Además, se reveló que desde el gobierno no están dispuesto a abrir una negociación.
Bajo el lema "Sin salarios dignos no hay universidad pública", los estudiantes de la universidad pública no tendrán clases los días 20 y 21 de agosto. Además de estar desfasados con la inflación, los docentes perdieron más del 50% de su poder adquisitivo, según el vicerrector de la UBA, Emiliano Yacobitti, quien agregó: "El Gobierno está intentando quitar legitimidad de algo que funciona bien, haciendo que de a poquito funcione mal, cerrándole el grifo. No tengo ninguna duda de que Javier Milei quiere cerrar la universidad pública porque es parte de lo que él llama una organización criminal, que es el Estado".
El horror enfrentado con humor
La Universidad de Buenos Aires (UBA) hizo circular una nueva campaña en la que piden "salarios dignos para que los profesores puedan estar en las aulas". Con distintos clips, difundido en las redes sociales, se presentan a los profesores trabajando en otros puestos alejados de la educación, debido que así podrían ganar el dinero suficiente para solventar los gastos de sus vidas privadas.
Además de los sueldos de los docentes, la universidad pública sufre los recortes de la motosierra de Milei. No solo cuentan con pésimas condiciones en sus instalaciones, sino que además imposibilitan la cursada en condiciones óptimas: "Querides, pequeño cambio de planes para esta semana. Nos acaban de avisar que el paro incluye al personal administrativo de la Facultad, por lo que habrá algunas aulas cerradas y no hay disponibilidad de equipos audiovisuales para martes y miércoles.", se puede leer en un mail recibido por una alumna de la Facultad de Ciencias Sociales de la UBA.
La estudiante asegura que los docentes de la comisión de Seminario de Cultura Popular se toman la situación con cierto humor, ya que si no deberían dejar sus puestos de trabajo y dedicarse a otra profesión: "Tenemos que suspender el Teórico. Nuestras clases son multimediales y requieren un enorme equipamiento: columnas de sonido, equipo de luces, una pantalla gigante, tres elefantes, 10 acróbatas, 45 bailarines y 280 personas en total en escena. Lamentablemente, no podemos garantizar esas condiciones", culmina el mensaje. Pese a la reacción humorística, no debe correrse el foco de la grave situación a la que se enfrentan los universitarios.
Luego del paro de 48 horas iniciado este martes, ya se comienza a hablar de una posible marcha federal para la segunda semana septiembre. Se especula que sea del mismo peso que la marcha universitaria llevada a cabo donde millones de estudiantes, graduados y docentes se movilizaron en defensa de la universidad pública.