La Comisión de Estudio de Fenómenos Aeroespaciales desestimó unas cuarenta denuncias sobre avistamientos de Objetos Voladores No identificados (OVNIS) en la Argentina. Según un informe de la Fuerza Aérea Argentina, se trató de confusiones con fenómenos naturales. “Existen miles de objetos ordinarios que producen confusiones en la gente”, explicaron.
En total son cerca de 40 avistamientos de OVNIS, investigados por la Comisión de Estudio de Fenómenos Aeroespaciales (CEFAe), un organismo a cargo de Rubén Lianza que depende de la Fuerza Aérea. El objetivo de la entidad pública es “esclarecer los avistamientos que se hayan registrado”. Por año reciben decenas de consultas por objetos extraños que logran captar en fotografías y que llaman la atención.
Alguna de las imágenes que recibe el organismo que investiga si hay OVNIS.
Según Lianza, en las fotos “no se busca vida extraterrestre”. “Muchas personas logran tomar fotografías cuando ven algo en el cielo que no pueden explicar y otras cuando ven las fotos que tomaron y notan objetos que parecen volar y que no esperaban ver ahí. En esos casos muchos se contactan con nosotros con la expectativa de que identificamos esos objetos voladores”, señaló el experto.
El organismo fue creado en 2011, durante la gestión de Cristina Kirchner. El dato llamativo es que su primer informe fue publicado recién cuatro años después. El objetivo de la creación de la entidad fue el “creciente avistamiento de OVNIS en el país”. La tarea concreta es estudiar con método científico a los objetos. En total el año pasado se registraron diez casos entre noviembre de 2014 y noviembre de 2015.
Rubén Lianza, el piloto a cargo del organismo que investiga avistamientos de OVNIS.
Lianza explicó que los objetos de “origen ordinario” pueden provocar confusiones. La comisión no utiliza el término OVNI, sino “fenómeno aeroespacial”. Las explicaciones del organismo son puramente científicas: orígenes ópticos (reflejos del lente, partículas, gotas), pero también biológicas: aves o insectos que se cruzan frente a la cámara, que forman ilusiones ópticas.
De todos modos, Lianza señaló que también existen causas astronómicas, como la Luna a plena luz del día, estrellas, planetas o inclusive la caída de meteoros, así como también el reflejo del sol en espejos de satélites de comunicaciones, aviones o globos experimentales. Según el relevamiento, un 40 por ciento de los casos en el informe son biológicos, un 37,1 son efectos de la cámara y el 2,9 por efectos satelitales.
Las imágenes provienen desde distintos puntos del país.
“Cuando la gente ve cosas al límite de la visión, el cerebro completa la información faltante recurriendo a la imaginación. Esto puede ocurrirle a una persona sin experiencia aeronáutica como al piloto más experimentado”, señaló Lianza, quien agregó que no reciben únicamente testimonios, sino también fotografías, videos o evidencias materiales.