08 Marzo de 2018 16:52
Chuck Berry, Muddy Waters, Bill Haley, Little Richard. Todos los nombres que aparecen cuando se piensa en los orígenes del rock son masculinos. Sin embargo, una mujer se alza en la historia del género, englobando y anticipando a todos los demás.
Sister Rosetta revolucionó el mundo de la música.
Es Sister Rosetta Tharpe, quien llevó la música religiosa afroamericana a los ámbitos populares, sumándole ritmo y electricidad con sus increíbles habilidades como guitarrista.
Ya a los cuatro años, en 1919, se había convertido en la pequeña estrella de los festivales de gospel del estado de Arkansas, donde nació, cantando y tocando junto a su madre. Su fama local era tal que, cuando se casó a los 19 años, miles de personas fueron a su boda.
Con menos de 30 años, Rosetta ya era una celebridad.
En aquel entonces, su imagen era ciertamente impactante: sus prolijos vestidos, adecuados a las costumbres que la época dictaba para las damas que concurrían a la iglesia, contrastaban con las guitarras de perfil eléctrico que elegía para tocar. Y su primer registro grabado, la canción Strange Things Happening Every Day (1945) ya tiene un ritmo distintivo que ningún artista había logrado hasta ese momento.
"Hacía retroceder a los hombres"
Más allá de eso, sobre el escenario Rosetta era un fenómeno digno de ver, una mujer desafiante repleta de confianza y, sobre todo, con un estilo netamente rockero al momento de tocar, que muchos luego copiarían.
"Los hombres la miraban y no sé si tendrían envidia o qué, pero ella podía tocar mucho mejor que ellos. Era la única mujer que conocí que hacía retroceder a los hombres cuando agarraba una guitarra", supo comentar Inez Andrews, una de las cantantes que supo acompañarla en sus shows.
Tharpe junto a Marie Knight, con quien se dice que tuvo un romance.
De hecho, Tharpe fue literalmente responsable de hacer subir a Little Richard, uno de los padrinos del rock, a un escenario: en 1947, cuando el artista tenía solo 13 años, lo escuchó cantar antes de uno de sus conciertos y lo invitó a acompañarla sobre las tablas en lo que fue la primera actuación pública de Richard fuera de una iglesia.
"Estoy seguro de que muchos chicos agarraron por primera vez una guitarra luego de verla tocar", aseguró alguna vez Bob Dylan. Elvis Presley y Johnny Cash también declararon su admiración por ella.
En los años '60, la carrera de Rosetta resurgió en Inglaterra,
Pero su vida revolucionaria fue mucho más allá de lo musical: luego de separarse de su marido, un ministro religioso, era un secreto a voces que Rosetta había comenzado un romance con la cantante Marie Knight, el cual se mantuvo lógicamente oculto a causa de los prejuicios de la época.
Y a pesar de que su muerte fue temprana -a los 58 años- tuvo la suerte de que su carrera fuera rescatada en los años '60 gracias al auge del rock afroamericano en Inglaterra. A fines del año pasado, finalmente, le llegó un merecido honor: su introducción en el Salón de la Fama del Rock.