Al crecer la crisis económica y social de la Argentina, también lo hacen sus expresiones políticas más reaccionarias, que buscan criminalizar a la juventud y tildar a los menores de edad como potenciales criminales, sin tener ningún tipo de prueba estadística. Mientras que el ministro de Justicia, Mariano Cúneo Libarona, busca bajar la edad de imputabilidad a los 13 años, en la localidad sanluiseña de Naschel una nueva normativa obliga a que después de la medianoche los menores de 16 sólo puedan salir acompañados por un mayor.
Lo cierto es que en la Argentina cualquier menor de 18 años que cometa un delito lo paga con penas de adulto, pero en reformatorios. Lejos se está del mito acerca de que los niños, niñas y adolescentes roban y salen por una puerta giratoria. Aunque esto no quiere decir que los espacios políticos más de derecha aprovechen la discusión para criminalizar a la juventud y ganar los votos que cosecha el miedo a la inseguridad.
"Desde el Consejo Deliberante se estuvo trabajando en una nueva ordenanza que establece el condicionamiento de que los menores de 16 años tengan que circular, entre las 00 y las 6, acompañados de un adulto responsable", reveló la intendenta de Naschel, Valeria Kuhn. "En el caso contrario de que esto no se dé, hay un procedimiento que se está estableciendo a través de un decreto reglamentario, para que la Policía pueda ubicar a los tutores y tomar cartas en el asunto", agregó en una entrevista ante América TV.
La imposición realizada de forma democrática no tiene mucha justificación más que la presunción de que los jóvenes son criminales por una cuestión etaria y nada vinculada a las problemáticas sociales actuales. "Naschel es una localidad que ronda los cinco mil habitantes y un poco todos nos conocemos. Pero hemos visto que el clima de dejar la bicicleta afuera, de poder estar con la puerta abierta, es algo que nos ha preocupado porque vemos que no se puede", advirtió.
"Hemos tenido varios hechos de hurto a lo largo del tiempo, que se han ido acrecentando. Hemos tenido el caso de un asalto a una señora mayor. Esto hizo que empecemos a trabajar localmente en materia de seguridad. Se conformó un consejo local de seguridad y estamos entre todas las instituciones del pueblo trabajando en distintos temas", describió Kuhn. Lo cierto es que no tiene forma de demostrar que estos hechos delictivos sean hechos por menores.
A su vez, la notoriedad de un proyecto de este tipo, les da la suficiente exposición pública como para popularizar el tema. "Esta normativa ha tenido mucha trascendencia. De hecho hemos podido hablar con muchos medios. Ha llamado mucho la atención. Porque tiene que ver con esto: prohibir o no prohibir que los menores puedan circular. En realidad nosotros no podemos prohibir que circulen", reconoció la intendenta.
"Sí podemos condicionar que esa circulación sea segura. El espíritu de esta ordenanza justamente es ese, que los chicos puedan andar en la calle, puedan ir a un cumpleaños de 15, pero que haya un papel también protagónico de los padres. No que un chico se pueda ir sólo o estar hasta altas horas de la noche sin control", explicó después, en relación a los límites de su proyecto.
"De esta ordenanza derivó que nos capacitaron letrados en este tema. Lo que nos decían era que no podemos prohibir la circulación. Sí podemos condicionar ciertos criterios por un tema de seguridad y de resguardo. La ordenanza también establecía que los menores fueran llevados a la Comisaría. Eso se está modificando porque no podemos pedirle que traslade a un menor si no está cometiendo un delito. Que en ese caso tiene que dar intervención un juez de familia y un fiscal", detalló Kuhn.
Si bien puede parecer casualidad, todo se da en la misma semana en la cual la Cámara de Diputados discutirá la baja en la edad de imputabilidad en el marco de un nuevo régimen penal juvenil, para los casos de jóvenes de entre 13 y 18 años "cuando fueran imputados por un hecho tipificado como delito en el Código Penal o en las leyes penales especiales vigentes o que se dicten en el futuro".
El nivel de la discusión es tal que en el proyecto se pueden leer frases como "el adolescente imputado gozará de los derechos y garantías reconocidos en la Constitución Nacional", como si a través de un cambio de este tipo se pudiera ignorar la Carta magna nacional, madre de todas las leyes. "El juez y el representante del Ministerio Público Fiscal deberán velar en todo momento por la tutela efectiva de los derechos de las víctimas y de las personas perjudicadas por los delitos cometidos por los adolescentes", agrega en otro tramo.