La decisión de la Corte Suprema de Justicia sobre la presencialidad en las escuelas de la Ciudad de Buenos Aires en medio de la pandemia de coronavirus cambió todo. A partir de ese momento, el presidente Alberto Fernández apuró la redacción del proyecto de ley para otorgar al Poder Ejecutivo facultades extraordinarias dictar medidas de restricción durante la pandemia de coronavirus, hasta el 31 de diciembre de 2021 para dictar.
De esta manera, el objetivo principal es terminar con el debate entre las jurisdicciones y establecer un criterio único para las restricciones durante la segunda ola. Con base en el último Decreto de Necesidad y Urgencia, el proyecto fue firmado por el primera mandatario antes de partir a Europa para su gira y, finalmente, lo presentaron en el Congreso en la tarde del lunes.
El proyecto con referencia “Parámetros epidemiolo?gicos y sanitarios regulatorios de la emergencia” está fundamentado en las facultades que le da la Constitución Nacional y en los diversos convenios y pactos internacionales que firmó el país. La medida ya fue rechazada por Juntos por el Cambio. Pero en el Ejecutivo creen que podría estar vigente para el 21 de mayor.
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En su artículo 2°, establece su objeto: “Establecer medidas sanitarias generales de prevención que se aplicarán en todo el país y disposiciones locales y focalizadas de contención y disminución de contagios de COVID-19”. Y completa: “Asimismo, tiene como objeto que los gobernadores y las gobernadoras de provincias, el jefe de Gobierno de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires y el Poder Ejecutivo Nacional, según el caso, adopten medidas sanitarias”.
Según el escrito al que pudo acceder BigBang y fue presentado en el Congreso, la ley le dará la facultad al presiente para aplicar restricciones en distritos que se encuentren en alarma epidemiológica, tal como se desprende del último DNU. En el mismo, se dividen las zonas en cuatro categorías: de Bajo Riesgo, Medio Riesgo, Alto Riesgo y Alerta Epidemiológica. Tanto la Ciudad de Buenos Aires como la Provincia de Buenos Aires, es decir, el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA) se encuentra en la última categoría.
En ese punto, as provincias aplicarán las medidas de control y de fiscalización. Según la ley, cada jurisdicción estarán condicionadas por la definición de riesgo sanitario o alarma epidemiológica. Y podrán aplicar más medidas restrictivas si así lo requieren.
En ese sentido, el proyecto establece los diversos parámetros epidemiológicos y sanitarios conforme los cuales las jurisdicciones locales y el Gobierno nacional para adoptar las medidas. Cada medida tendrá base en esos criterios y no se nombran zonas específicas del territorio nacional.
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Además de dejar en claro cuáles son las actividades suspendidas, los horarios de restricciones de circulación, el uso de transporte público sólo para esenciales y las diversas condiciones de higiene y seguridad, también se especifica cuáles serán las conductas generales de la población para evitar la propagación de coronavirus.
En cuanto a las clases presenciales, tal como sucede en la Ciudad, el proyecto establece la suspensión se dispone únicamente para las jurisdicciones que se encuentren en Alarma epidemiológica y se prevé que, previa consulta con la provincias, el Poder Ejecutivo podrá morigerar o dejar sin efecto esa restricción.
En las ciudades que estén dentro de Alerta Epidemiológica, las clases presenciales deberán ser suspendidas. Habrá clases virtuales hasta que se pueda salir del estado de alarma. Para eso es necesario que se reduzca la ocupación de las camas de Terapia Intensiva, se desaceleren los contagios y caiga la tasa de incidencia cada 100.000 habitantes.
Por otra parte, el proyecto de ley deja en claro que el presidente tendrá facultades extraordinarias para aumentar las restricciones en los lugares que se encuentren en Alarma. Y establece que puede aplicar “suspensiones adicionales y ampliar previa consulta a las provincias, con informe de autoridad sanitaria local”.
Por eso, el primer mandatario puede dejar sin efecto o morigerar las prohibiciones con intervención de la Autoridad Sanitaria Nacional; establecer suspensiones adicionales y ampliar previa consulta a las provincias, con informe de autoridad sanitaria local. Entre esos puntos, lógicamente, se encuentran las clases presenciales.
En cuanto a la presentación, la secretaría de Legal y Técnica de la presidencia de la Nación, Vilma Ibarra, afirmó en una entrevista, minutos después de la presentación: "Este proyecto tiende a las medidas y competencias que tienen cada uno de los gobernadores, los municipios y el Gobierno nacional. Además el Estado está obligado cuidar, preservar y proteger la vida de los habitantes”.
Y agregó: “Como corresponde en una democracia, vamos a debatirlo, vamos a discutirlo. Esperamos que se comprenda que esta pandemia no se enfrenta en situaciones de agresiones, ni rispideces. Los que gobernamos tenemos la responsabilidad de darle una respuesta a la ciudadanía que tiene miedo, está angustiada y tiene preocupación por sus seres queridos”.
“Nosotros tenemos que tratar de contener lo que es la pandemia y tenemos que hacerlo con las herramientas que tenemos, y del mejor modo posible. Motivo por el cual, las autoridades que correspondan tomarán las medidas que correspondan. Nosotros lo que tenemos que hacer es gobernar”, dijo Ibarra, en cuanto a las jurisdicciones que se negaron a acatar el DNU anterior.
“Tenemos que dar respuestas y llevar tranquilidad a la gente en un momento de tanta angustia. Las medidas federales, las decisiones de un DNU como las leyes nacionales están para ser cumplidas, y hay autoridades que tienen que garantizar ese cumplimiento. Nosotros fuimos llamados y elegidos por la ciudadanía para establecer las políticas públicas, para establecer las políticas de salud, y por eso proponemos estas medidas. Y creemos que todo lo que lastime esa situación, no es bueno para la ciudadanía en medio de una pandemia que ha lastimado a muchas personas en todo el mundo Esto es un llamado a la unidad”, aseguró la secretaría legal y técnica, sobre la diputa con Rodríguez Larreta.
Y cerró: “El virus no reconoce ni límites políticos, ni ideologías políticas. Nos toma a todos por el igual. Eso es un dato central y tenemos que hacernos cargo de esta situación. Y el Gobierno Nacional tiene que trabajar todos los días como lo está haciendo para cuidar a los argentinos y las argentinas”.