La Policía bautizó el procedimiento como “Operación Laberinto” por los pasillos angostos y puertas falsas que tiene la villa “Palito” de la Matanza, donde detuvieron a ocho hombres y dos mujeres y se secuestraron 25 mil dosis de paco listas para vender, además de tres mil de marihuana, una pistola calibre 9 milímetros, un revólver calibre .38, balanzas de precisión, elementos para el estiramiento y fraccionamiento de la droga, teléfonos celulares y dinero en efectivo.
La Bonaerense los detuvo después de un tiroteo. La banda contaba con "satélites", que eran los encargados de dar el aviso ante la llegada policial, que estaban distribuidos en puntos estratégicos a manera de custodia en el interior del asentamiento.
La banda tenía un cuaderno donde llevaba la “contabilidad”: en un día llegaban a facturar 80 mil pesos.