Lo clásico es que las personas traten de embellecerse, más allá del estilo estético que prefieran. Es una cuestión de imagen, de autoestima, de coquetería. Pero las definiciones de estética y belleza son subjetivas y relativas en cada cultura y sociedad.
Nadie, se supone, “afea” su rostro o su cuerpo conscientemente. Sin embargo, ocurre. y es una tendencia global.
Miles de personas hacen lo posible mediante el make up para verse “no atractivas” y suben sus imágenes a las redes sociales. La idea es revelar, de esa forma, una belleza perfecta, no explícita. Y no juzgar.
La transformación de la imagen. Y a no juzgar.
La tendencia tiene su hastag: #DontJudgeChallenge, una idea que apunta a cuestionar los estándares convencionales de belleza y liberar la diversidad estética. Y casi no tiene límites, desde maquillarse recreando acné falso, hasta pintarse los dientes y más. Cada vez tiene más seguidores.