Hace algunos días empezó a circular en las redes sociales un video que mostraba que los clientes del supermercado Coto de Moreno se empujaban y hasta golpeaban por agarrar unas bandejas de milanesas sin rebozar.
El hecho llamó mucho la atención en medio de un contexto de crisis económica, por lo que ante esta triste situación BigBang visitó la sucursal donde ocurrió la avalancha, y según dijeron los empleados del lugar, este tipo de cosas pasan todos los días, y desde hace casi dos años, debido a que manejan precios muy bajos.
Se hizo viral un video donde se muestra una avalancha de gente desesperada por comprar carne.
Desde esperar tres horas para comprar un corte especial de carne, hasta hacer fila por las mañanas antes de que abra el mercado, este portal averiguó la odisea que los compradores de Moreno, el municipio que dirige el intendente Walter Festa, llevan a cabo cada día para comprar carne buena y barata.
Según explicaron desde Coto, la grabación que trascendió "les llamó la atención" porque aunque siempre hay mucha demanda de carne en la sucursal, lo cierto es que ese día las milanesas no tenía una oferta especial.
"Nunca ha pasado una cosas así y no estamos de acuerdo con esa situación, pero la realidad es que la gente viene por la oferta. Coto es un referente en todo lo que es carne", aseguraron desde el supermercado.
En este sentido, explicaron que los compradores eligen el supermercado por la calidad, variedad y precio de lo que brindan, cosa que no pasa en otros lugares. Sobre los precios, comentaron también que sufrieron una variación mínima, pero que de ningún modo representan los aumentos que surgieron en los últimos días.
"En Moreno hay una oferta muy bien plantada, y desde que se abrió la sucursal siempre se ha dado un crecimiento sostenido", dijeron por último.
Quienes eligen comprar en el mercado argumentan que lo hacen por el precio que se ofrece.
Luego de la viralización del cruel video grabado el sábado pasado, BigBang recorrió en las últimas horas las instalaciones del lugar y notó que había una gran cantidad de gente que esperaba su turno para comprar en la carnicería un corte de carne que no se ofrece en las góndolas.
Uno de los repositores del supermercado contó a este medio que desde que abrió la sucursal en la localidad, hace ya casi dos años, siempre hay mucha gente que elige comprar carne ahí porque es más barata.
Todos los días, cerca de las 7 de la mañana, cuando todavía Coto está cerrado, una decena de personas se paran en la puerta del lugar para hacer fila con el único objetivo de entrar primeros para poder elegir qué corte comprar y la cantidad.
Los compradores hacen colas durante horas para poder comprar en la carnicería.
La mayoría tiene miedo de que la mercadería se acabe, por lo que prefieren llegar apenas abre el comercio para conseguir así la carne que quieren a un buen precio.
Algo parecido pasa durante todo el resto del día, cuando habitualmente los compradores no dejan que los repositores lleguen a las góndolas de carne con el carro lleno, porque en cuanto los ven salir de los depósitos se acercan para guardar en los changos su parte.
Algunos sacan la mercadería desde el carro que llevan los repositores.
Todos los empleados de Coto coinciden que en el fenómeno se produce porque el precio y la calidad de los productos son buenos, lo que hace que la gente elija comprar en esa cadena, aunque tenga que esperar durante horas.
El mismo repositor contó que el pico mayor de gente se da a la mañana y a la tarde, cuando los compradores son capaces de hacer tres horas de fila para poder comprar directamente con el carnicero. Aunque durante los fines de semana la cantidad de personas que asisten aumenta, la realidad es que durante toda la semana las cosas se mantienen así.
Algunos compradores hacen fila antes de que el súper abra.
Por último, acerca del video que se publicó en las redes dijo que situaciones de este estilo se viven muy seguido en el supermercado, pero que los empleados que grabaron la escena se arrepintieron porque sintieron que dejaron expuestos a los compradores.
Lo cierto es que si uno pasea por la parte de las heladeras, puede escuchar a los vecinos de Moreno preocupados y en alerta. Entre ellos conversan sobre el precio de las cosas y comparan a cuánto se vende la carne en otro lado. Los valores que se manejan en la sucursal de Coto de Morena rondan los $130, como es el caso del kilo de bola de lomo y vacío, mientras que cortes como la tapa de asado o el bife ancho cuestan cerca de $100.
Coto ofrece diferentes cortes de carne en las góndolas y otros en la carnicería.
"A veces la gente se enoja cuando falta algún corte en las heladeras, pero la verdad es que vendemos todo y lo que no reponemos es porque ya no queda más", dijo por último el empleado y luego se dedicó a explicarle a una señora que ya no quedaba más peceto, y que le convenía volver al día siguiente más temprano para poder conseguirlo.
Qué dicen los clientes
José Almirón es uno de los clientes más habituales de la sucursal de Coto de Moreno, ya que suele ir al súper hasta dos veces por día porque vive cerca. Sin embargo, la carne es uno de los productos que más le cuesta comprar, porque hay demasiada demanda y mucha gente esperando su reposición.
"Se te hace imposible comprar, hay un desbande de gente. En las góndolas hay poca carne porque los otros compradores no la dejan poner", contó a BigBang a la salida de una de sus compras habituales.
"Cuando vienen con los carritos cargados de carne para reponer, la gente se abalanza. Desde que abrieron hasta ahora nunca compré en el mostrador, siempre en la góndola por la cantidad de gente que hay", reveló, al mismo tiempo que sostuvo que suele ir a ese supermercado porque los precios son buenos.