El volcán chileno no da tregua, tras volver a hacer erupción ayer, las cenizas de su tercera erupción vuelan en dirección a Esquel a unos 70 kilómetros por hora y podrían llegar a la ciudad costera de Puerto Madryn.
La situación complicó la programación de vuelos en gran parte de la Patagonia. Aerolíneas Argentinas ya había suspendido las rutas aéreas desde y hacia Neuquén Capital producto de las cenizas en suspensión de las erupciones anteriores del Calbuco.
En Bariloche se constituyó nuevamente el Comité de Emergencia y peligra la celebración de los 113 años de vida de la ciudad.
Barbijos para todos y todas
En este contexto el Ministerio de Salud de la Nación envió ayer a las zonas afectadas por las cenizas del volcán chileno Calbuco un cargamento de 120.000 barbijos, antiparras y gotas oftálmicas para el tratamiento de la irritación ocular, entre otros insumos.
El subsecretario de Prevención y Control de Riesgos del ministerio de Salud, Homero Giles, explicó que "los barbijos tipo N95 o con filtros, se reservan para personas con enfermedades respiratorias y cardíacas moderadas a severas y para quienes lleven a cabo tareas de limpieza en las calles, edificios, personal de defensa civil, rescatistas y personal de salud", entre otros.
"Los barbijos comunes pueden ser utilizados por la población en general sin ningún tipo de inconvenientes y se recomienda usarlos en forma doble, es decir, superponiendo dos barbijos, previamente humedecidos", explicó el funcionario.
Y agregó que "en caso de no contar con ningún tipo de mascarilla, pueden utilizarse pañuelos dobles -también preferentemente húmedos-, cubriendo eficientemente la boca y la nariz".
Recomendaciones:
Se solicita a los pobladores permanecer en el interior de las viviendas o instituciones y en el caso de exponerse al aire libre utilizar máscaras protectoras, pañuelos de trama fina o barbijos dobles como sustitutos para retener las partículas respirables.
También es importante evitar que la piel no entre en contacto con las cenizas y para ello debe utilizarse una vestimenta adecuada, es decir mangas largas, guantes y botas.
La lluvia de cenizas puede provocar síntomas respiratorios agudos como irritación y secreción nasal, irritación y dolor de garganta, irritación de las vías respiratorias en personas con asma o bronquitis.
También síntomas oftalmológicos como conjuntivitis y abrasiones de la córnea, entre otros e irritación de la piel como dermatitis y alergias, entre otros.