En junio de 2020, la desaparición de Madeleine McCann sumó un nuevo episodio con la aparición de un sospechoso y la definición del fiscal alemán Hans Christian Wolters, quien manifestó al periódico The Mirror que había "evidencia concreta" de que la niña había sido asesinada.
De acuerdo a esta línea de investigación el culpable es Christian Brueckner, un alemán de 44 años actualmente preso por violar a una mujer norteamericana de 72 años en la localidad portuguesa de Praia da Luz, el mismo lugar en que la familia McCann vacacionaba cuando su hija desapareció.
El criminal vivió entre 1995 y 2007 en la zona de Algarve, en el sur de Portugal, donde cometió varios delitos. Llamativamente, abandonó el país el mismo año en el que desapareció Madeleine para volver a Alemania.
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Durante el tiempo en el que vivió en Portugal, Brueckner se desplazó en un Jaguar XJE 6 oscuro con patente alemana, y una camioneta Volkswagen blanca y amarilla con matrícula portuguesa.
Testigos aseguran que el 3 de mayo de 2007, día de la desaparición de Madeleine, esa camioneta fue vista en las inmediaciones de Praia da Luz. Paralelamente, el día posterior al hecho, el sospechoso transfirió su Jaguar a nombre de otra persona.
Otra de las pistas que apuntan a Brueckner es una llamada de 30 minutos desde su número a otro con característica de Portugal. La policía aún no pudo encontrar al interlocutor de esa charla.
El criminal además tiene antecedentes de pedofilia. En 1994, cuando tenía 17 años, fue condenado por abusar de un niño en Baviera. Años más tarde, en 2015, se convirtió en el principal sospechoso detrás de la desaparición de Inga Gehricke, ya que se encontraba cerca de la zona.
Si bien la policía no encontró pruebas suficientes para inculparlo en ese caso, sí halló alrededor de 8000 imágenes de pornografía infantil cuando rastreó la fábrica en la que vivía.
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Además, se encontraron más imágenes en memorias y pendrives, a través de las cuales se descubrió que Brueckner había abusado de la hija de cinco años de su ex novia. Y dentro de un motorhome, había varias prendas infantiles.
"Asumimos que el acusado mató a Madeleine", aseguró el fiscal Wolters. "Aunque es muy difícil después de todo este tiempo llevar a cabo la investigación del caso que va a cumplir 14 años, nos mantenemos optimistas y esperanzados en que vamos a poder resolver este crimen". De todas formas, aún no hay pruebas suficientes para imputar a Brueckner en relación a la desaparición de la niña británica.