24 Junio de 2020 10:17
El Gobierno se prepara para anunciar mañana no sólo la extensión de la cuarentena como consecuencia de la pandemia del coronavirus (Covid-19) hasta el 12 de julio sino que además impondrá un endurecimiento en el AMBA como consecuencia de la suba de casos en la provincia de Buenos Aires y en la Ciudad.
El anuncio formal sería mañana y contaría con el presidente Alberto Fernández, el gobernador de la provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof, y el jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta. Si bien todavía ninguna medida fue confirmada, sí hubo algunos indicios de un borrador inicial, como reuniones en el Ministerio de Seguridad para plantear cómo serán los controles policiales; y el estudio de una idea que ni siquiera fue aplicada en el primer momento de la cuarentena: la suspensión del transporte del Conurbano a la Ciudad. En Olivos, plantean que la nueva fase del aislamiento será un "endurecimiento" y no "un retroceso".
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Uno de los puntos es la suspensión de la posibilidad de salir a correr en la Ciudad, algo sobre lo que Fernández y Kicillof se mostraron en contra desde un primer momento. No así, aún, las salidas de los fines de semana de los padres con los niños menores de 16 años.
Otro cambio sustancial con respecto a lo que fueron las primeras dos semanas de cuarentena, allá por marzo, es que los bancos estarán abiertos, pero con más restricciones. Una de las dudas es si la misma medida se aplicará a otros comercios de cercanía que empezaron a estar habilitados de forma gradual después de las primeras tres semanas de cuarentena. Ese es uno de los puntos sobre los que debatirán los tres funcionarios mañana en Olivos.
En cuanto al transporte público, existen un consenso general entre Fernández, Kicillof y Rodríguez Larreta, en que el foco tiene que estar puesto en el control dentro de colectivos, trenes y la red de subterráneo, más que en la prohibición ya que muchos trabajadores esenciales (salud, seguridad, prensa y algunas dependencias administrativas) utilizan esa vía de transporte. A eso se le suma que sólo el 13 por ciento de la totalidad de viajes diarios corresponde al tráfico entre la provincia de Buenos Aires y la Ciudad.