De acuerdo a un sondeo encabezado por eel Instituto de Estudios de Consumo Masivo (INDECOM), gran parte de las empresas públicas y privadas decidieron abaratar costos en lo que a festejos de fin de año se refiere.
Las fiestas de fin de año se vuelven austeras.
Así, tanto las grandes empresas como las Pymes redujeron en un 32,4% las reservas en restaurantes y salones de eventos en relación a finales del año pasado.
Sobre ese porcentaje, un 23,1% declaró que celebrarán fin de año en sus propias salas de reuniones o espacios verdes, mientras que el 9,3% restante directamente suspendió sus habituales festejos.
Las reuniones privadas, también en baja
En relación a la reuniones de fin de año informales entre compañeros de trabajo, la reducción de reservas llega al 43,6%.
Los brindis entre amigos se harán en casa.
De ese porcentaje, el 84,3% de los consultados optó por organizar sus festejos en casas particulares y el 15,7 % los suspendió. La modificación de hábitos se le endilgó, en un 61,1%, al aumento de precios de los locales gastronómicos.
Esta situación, a su vez, influyó en el mapa de trabajo en restaurantes, bares y otros reductos gastronómicos. Así, la oferta laboral para cubrir francos de Navidad y Año Nuevo se redujo en un 48,7% lo lo cual, de acuerdo al 67% de los directivos de esos locales, se debe a la caída de reservas.
La muestra
El sondeo de INDECOM se realizó durante las últimas dos semanas sobre un total de 156 pequeñas y medianas empresas, 74 compañías nacionales y extranjeras, y 128 restaurantes y espacios de eventos en Capital Federal, Gran Buenos Aires y Rosario.
Las reservas en restaurantes mostraron una caída pronunciada.
Además, se encuestó en vía pública a unos 964 trabajadores del ámbito público y privado, y se sumaron datos provistos por fuentes de la Unión de Trabajadores del Turismo, Hoteleros y Gastronómicos de la República Argentina (UTHGRA).