Todo comenzó el 17 de noviembre, cuando dos nenes de 6 años de nacionalidad africana fueron abandonados por su padres adoptivos en la Comisaría de la Mujer. Eduardo Rucci y Natacha Perri manifestaron que era “su deseo de entregar a los niños, desentendiéndose totalmente de las obligaciones paternas de cuidar, convivir, alimentar y educar”, luego de que ambos los adoptaran en agosto de 2019.
A los cinco, los pequeños habían sido derivados a un orfanato en Guinea Bissau luego de que su madre biológica falleciera. Allí conocieron al matrimonio, que no dudó en adoptarlos. Según trascendió, los nenes habían entrado al país con visa de turistas en 2019 por cuestiones humanitarias que se venció al poco tiempo. Rucci y Perrig debían renovarla e iniciar el trámite de adopción formal en el país, pero nunca lo hicieron.
Según las primeras investigaciones que buscan determinar la legalidad del procedimiento de adopción de estos dos niños que "se encuentran en buen estado de salud", contenidos "en espacio alternativo familiar", y a quienes se ofrecieron a ayudar más de 500 personas, entraron al país con visa de turistas. "Nunca registraron que los dejaban para no venirlos a buscar", contaron las fuentes sobre sus padres adoptivos.
Por pedido de Florencia Demaestri, titular de la Asesoría de Incapaces N° 2 de Bahía Blanca, y del fiscal Marcelo Romero Jardín, el juez de familia Martín Larceri determinó que el matrimonio deberá sostener una cuota alimentaria provisoria para los niños hasta que se resuelvan los trámites que permitan buscarles una familia sustituta. El Estado administrará ese dinero para el sostenimiento de los chicos.
Actualmente los chicos están siendo cuidados en un hogar de abrigo, donde siguen "preguntando por su familia y en qué momento los van a buscar". La odontóloga y misionera costarricense que dirige el hogar de Guinea Bissau donde vivieron, aseguró que "nunca nos había pasado algo así" y que no es posible recibirlos de nuevo porque "ellos ahora son los padres y los encargados, y, si no los quieren, deben darlos en adopción a otra familia".Fuentes de la Unidad Funcional de Instrucción y Juicio (UFIJ) Nº8 a cargo de Romero Jardín señalaron que "los dos hermanos habrían ingresado al país con visa de turista" en agosto del año pasado en compañía de sus padres adoptivos, quienes además tienen una hija biológica de 11 años. "Se solicitaron informes a la Dirección Nacional de Migraciones e informes de residencias como así también movimientos financieros de la pareja", agregaron.
Los hermanos fueron abandonados el pasado 17 de noviembre por Rucci, que viajó a África para incorporarlos a la familia, "previo adoptarlos y haber convivido una semana juntos en el orfanato en el que se encontraban". Según la denuncia judicial, el hombre llegó a la Comisaría de la Mujer "sujetando a los menores de ambos brazos e informando que era su deseo entregar a los niños, desentendiéndose de las obligaciones paternas".
De acuerdo al expediente, "el hombre refirió razones personales que dificultan su vinculación y sostenimiento de la vida familiar", dice el expediente. "Los niños se encuentran en perfecto estado de salud, de alimentación y con todos los cuidados necesarios. Están alojados en un espacio alternativo familiar, donde trabaja todo el equipo de Niñez, entre ellos psicólogos", informaron desde la Secretaría de Políticas Sociales de la municipalidad de Bahía Blanca.
El Ministerio Tutelar les asignó abogados defensores a los hermanitos, que los representan en las dos causas judiciales. El objetivo es hacer los trámites lo más rápido posible para que los chicos obtengan la ciudadanía argentina legalizada: “Tienen una sentencia de adopción en África que debía ser homologada mediante Cancillería y no se hizo. Eso lo debe hacer alguien para que los chicos estén legalmente en el país”Letizia Tamborindeguy, integrante del Equipo Interdisciplinario de la Comisaría de la Mujer y la Familia de Bahía Blanca que los recibió e inició una investigación de oficio, contó, por su parte, que los chicos "nunca registraron que los dejaban para no venirlos a buscar", con "un bolsito y la documentación". "Había falta de documentación, datos que no estaban del todo claros, son nenes que tienen su identificación de África pero que no tienen documentación de Argentina, hay fechas de salida del país pero no de ingreso, cuestiones que nos hicieron mucho ruido", sostuvo.
Isabel Johanning, quien lleva más de 20 años dirigiendo la institución Casa Emanuel que alberga a chicos en situación de adoptabilidad, afirmó además que la documentación "estaba en orden", que el trámite judicial se hizo en regla y "todo parecía normal", incluso en el seguimiento posterior. La mujer contó que todo comenzó con una "carta de intención de adopción" que la pareja de argentinos les envió.
De hecho, contó que el matrimonio cumplía "con los requisitos, por eso los mandamos con nuestros representante en la Argentina". Allí se inició un proceso "que demora mucho tiempo" que la pareja pasó exitosamente y una representante del hogar hizo el seguimiento por "videollamadas". "Nos decían que los chicos estaban bien, que los chiquitos eran hiperactivos pero nunca me dijeron que no podían con ellos", dijo.
Por otra parte, más de 500 personas de todo el país se comunicaron con la municipalidad de Bahía Blanca tanto para ofrecer ayuda como para adoptarlos. La Defensora de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes Marisa Graham aseguró que "hace muchos años venimos registrando casos similares" al de los mellizos africanos, por eso "el Código Civil sigue prohibiendo la adopción internacional".
La Asesora General Tutelar, Yael Bendel, adelantó que 2 de cada 10 niños que están en estado de adoptabilidad, son devueltos y si hablamos de niños mayores a los 8 años, la cifra escala a 5 de cada 10. Actualmente hay diversos proyectos de ley que buscan modificar el sistema de adopción, pero todos los especialistas insisten en que la principal transformación es dejar de ver la adopción como una solución para los adultos.