16 Enero de 2017 20:51
El hecho ocurrió el pasado 7 de enero. Tobías, un nene de 5 años, fue picado en el cuello por un alacrán mientras estaba durmiendo en su casa de Palermo, en la esquina de Gurruchaga y Costa Rica. El pequeño, producto del veneno del arácnido que afectó su corazón, sufrió cuatro paros cardiorrespiratorios y fue internado en terapia intensiva en el Sanatorio Güemes.
Tobías se salvó gracias a la pronta actuación de su papá Gastón.
Si bien al principio los médicos le aseguraron a su padre, Gastón, que ya habían hecho todo lo posible por salvar a su hijo y que ahora simplemente restaba rezar, Tobías mostró un gran poder de voluntad y en las últimas horas manifestó una leve mejoría y podrían darle el alta el martes.
De acuerdo al papá de Tobías, este no es el primer problema que la familia sufre de la mano de los alacranes, ya que tanto él como su mujer también fueron picados. Los casos de niños y adultos atacados por alacranes y otras alimañas están en pleno crecimiento a lo largo y ancho del país.
Si bien los especialistas sostienen que la mayoría de estas picaduras no suelen ser mortales, en los últimos años se registraron, en distintos puntos de la Argentina, fallecimientos de chicos a causa del efecto tóxico que provocan los ataques de algunas especies de arácnidos.
El caso de Isabella y un alacrán mortal
El pasado 8 de enero, un día después que Tobías fuera picado por un alacrán, una nena de siete años murió en Córdoba tras ser atacada por el mismo animal en la ciudad turística de Villa Carlos Paz. Isabella Sánchez Quevedo fue picada ese sábado por un escorpión y falleció al día siguiente en un centro asistencial de la ciudad de Córdoba.
La nena padeció un shock cargiogénico.
La pequeña falleció tras padecer un shock cardiogénico y otras manifestaciones que alteraron sus signos vitales, a pesar de haber recibido el tratamiento con el suero antialacrán. La pequeña era hija del secretario de gobierno del municipio cordobés de Malagueño, Cristian Sánchez. Con este, y el de Tobías, ya se registraron tres casos de picaduras sólo en 2017.
Isabella y el alacrán II
El 3 de enero, una niña de cuatro años de edad falleció en el hospital Pasteur de Villa María. Los médicos reconocieron que la menor había sido picada por un alacrán.
La pequeña se llamaba Isabella Orellano y falleció tras ingresar al centro médico con un cuadro de complicación respiratoria y sufrir un paro cardiorespiratorio que terminó con su vida.
Joaquín, otra víctima
El 13 de diciembre de 2015, un niño de 6 años de edad, con domicilio en la localidad de Santa Rosa, en el departamento Valle Viejo, murió luego de que fuera picado por un alacrán mientras intentaba secarse luego de bañarse en su casa.
De acuerdo con lo que informaron las autoridades del hospital de Niños "Eva Perón", el pequeño Joaquín Valentino Silva había sido atendido en la guardia del Hospital, con los síntomas clásicos por picadura de alacrán (vómitos, sudoración profusa, taquicardia).
Los alacranes son mucho más activos con el calor.
Al pequeño se le había realizado el tratamiento habitual con la colocación de hasta 6 ampollas de suero antiescorpiónico, pero su salud no mejoró, los síntomas se fueron agravando y, finalmente, terminó perdiendo la vida por un edema agudo de pulmón y falla cardiovascular.
Jeremías, al borde de la muerte
El 17 de abril de 2015, y muy similar al caso de Tobías, Jeremías Paz sufrió cuatro paros cardiorrespiratorios después de haber ingresado al Centro Provincial de Salud Infantil (Cepsi) Eva Perón. El pequeño de dos años estuvo internado en terapia intensiva en el hospital de niños de la capital santiagueña luego de haber sido picado por un escorpión.
El arácnido lo atacó mientras jugaba con su hermano mellizo en el patio de su casa ubicada en Forres, a 30 kilómetros de la capital provincial. Pese a que el pronóstico no era muy alentador, finalmente Jeremías recibió el alta tras estar internado durante tres meses.
Exequiel y la araña mortal
En 2014, un menor identificado como Exequiel Natael Guajardo, falleció en el Hospital Perrupato, adonde había ingresado con una grave infección. Según el informe de los médicos, la muerte se habría producido por un "paro cardiorrespiratorio", producto de que días atrás había recibido la picadura de una araña en una de sus piernas.
Araña de rincón, suele esconderse en grietas y rincones de difícil acceso.
El pequeño de 2 años y 10 meses de edad ingresó al nosocomio con una infección entre el cuarto y quinto dedo de uno de sus pies y luego sufrió un paro cardiorespiratorio. Los especialistas informaron que hay solo dos arañas venenosas en Mendoza: la cuyucha y la viuda negra.
La fatal "araña de rincón"
En febrero de 2011, una niña de tres años que fue picada por una araña falleció en el Hospital de Niños de la ciudad de Córdoba. Según los médicos, la causa real de la muerte fue una complicación surgida de un trastorno cuagulohepático y de una hemorragia cerebral. A su vez, reconocieron que no es habitual el fallecimiento por picadura de araña.
La viuda negra posee una mancha de color rojo en forma de reloj de arena en la cara inferior del abdomen.
Según estimaban en un principio la picadura se produjo por una araña conocida como "rinconera", de ponzoña especialmente dañina. La pequeña de 3 años vivía en la zona de Agua Mansa, ubicada en la localidad cordobesa de Jesús María, 49 kilómetros al norte de la ciudad de Córdoba. El cuadro empeoró y luego de 7 días la niña falleció.
