Uno de los refranes populares, y que fue también inmortalizado en una novela de la televisión, es “los ricos no piden permiso” y durante la cuarentena como consecuencia de la pandemia del coronavirus (Covid-19) se vieron varios ejemplos. Los Nardelli, dueños de Vicentin, disfrutando de algunas tardes en el Delta con su yate cuando estaba prohibido cualquier tipo de salida; o el caso del conductor Marcelo Tinelli que logró viajar en avión privado al sur del país. También el ex presidente Maurcio Macri con sus viajes primero a Paraguay y luego a Suiza, ambos en plena cuarentena.
También estuvieron los casos de Susana Giménez y Oscar “Negro” González Oro que viajaron a Uruguay en aviones privados para radicarse en el país vecino. Pero a esos casos les llegó una nueva variante que tiene en vilo a la ciudad de Bariloche y sus alrededores: los viajes para ski.
Las autoridades de la provincia de Río Negro tuvieron que cerrar el aeropuerto de esa ciudad por un motivo insólito; habían detectado que varias personas viajaban desde diferentes puntos del país en aviones privados a la ciudad de Bariloche para poder disfrutar de la temporada de invierno.
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El plan es simple. Suelen juntarse entre 10 u 12 personas, alquilar un avión privado que -dependiendo del punto de partida- puede costar entre USD 4.000 y USD 6.000, aterrizar en Bariloche y desde allí dirigirse a algunos de los centros de ski de esa localidad o de las cercanas. Todo esto, además, con un permiso de circulación emitido por el Estado Nacional.
Dos casos que llamaron la atención y encendieron las alarmas hasta en Buenos Aires fueron el de la influencer Bárbara Pérez y del del ex tenista Gastón Gaudio. Ambos tenían que estar aislados en Buenos Aires pero mediante un permiso especial llegaron a Bariloche.
Un dato no menor es que, como consecuencia de la cuarentena por el coronavirus, se cancelaron todos los vuelos comerciales de cabotaje salvo los especiales para personas varadas y envió de suministros. No obstante, los aviones privados pueden circular con total normalidad siempre y cuando sus pasajeros cuenten con todos los requisitos solicitados por la administración nacional y la provincial.
Al dividir los gastos el costo equivale al que se podría llegar a pagar en plena temporada por un ticket en una línea área tradicional. Esto generó que, ante el aumento de casos de coronavirus, las autoridades tomen la decisión de cerrar el aeropuerto. “Están muy cautelosos de cualquier persona que puede llegar a venir desde la Ciudad u otra provincia. Todo por esta situación que notaron”, le explicó a BigBang una fuente al tanto de la situación.
Cabe recordar que en la provincia ya lleva registrados 4.074 casos positivos y 11 muertos de Covid-19 desde el inicio de la pandemia. Los viajes para esquiar en avión privado fueron advertidos casi de inmediato por las autoridades, que demoraron lo más posible la apertura de la temporada.
Cuando al poner en venta los pases se dieron cuenta de la gravedad de la situación, adoptaron mayores restricciones. Es por eso que desde hace tres semanas sólo los residentes pueden usar las pistas en los principales destinos para practicar esquí.