En una conferencia de prensa ofrecida en la Casa de Gobierno, el gobernador de Mendoza Rodolfo Suárez anunció la suspensión de la reglamentación de la ley 9.209, que modifica la norma sobre minería establecida en la ley 7.722.

La modificación, que permitía el uso de sustancias químicas tóxicas en la explotación minera, fue promulgada el martes pasado y rechazada masivamente por distintos sectores de la sociedad mendocina, que salieron a la calle para manifestar su descontento. En el resto del país, también se alzaron en contra de la medida y se llamó a movilizaciones en diferentes provincias. 

"Convocatoria al diálogo"

"Vamos a hacer una gran convocatoria al diálogo para que la gente se informe, para que dé información genuina", señaló Suárez. "Vamos a invitar a todas las entidades a que opinen. Aquí viven mis hijos, mis nietos y lo que más quiero es cuidar el agua".

Allí aseguró que los proyectos mineros en Mendoza son necesarios para "ampliar la matriz productiva" de la provincia y que aprobando la norma intentó "generar empleos con absoluta empatía con la gente que la está pasando".

"Existe la posibilidad de una consulta popular vinculante pero no queremos llegar a eso", agregó. "Queremos llegar en base al diálogo, dejando de lado la violencia por sobre todas las cosas. No queremos encapuchados, ni un espacio público dañado, ni policías heridos. Hay un solo objetivo que es el crecimiento de Mendoza, de este modelo que necesita un cambio".