En su reciente visita a Argentina, Barack Obama reveló que sus hijas tenían una "figurita difícil": la de Lionel Messi. Malia y Sasha siempre habían querido conocer al astro máximo del fútbol mundial, pero hasta ahora no habían tenido suerte.
Sasha y Malia son fanáticas de Lionel Messi.
Pero la "Pulga", siempre generoso, tomó nota del fanatismo de las adolescentes y decidió mandarles un regalo para al menos paliar la espera hasta el encuentro cara a cara: camisetas de la Selección argentina con sus nombres, dedicadas y autografiadas.
El emisario del regalo fue, por supuesto, Mauricio Macri, quien actualmente está de visita en Estados Unidos participando de la Cumbre de Seguridad Nuclear. El presidente se fotografió mostrando una de las camisetas en el ingreso del hotel Hay Adams, donde se hospedaen la ciudad de Washington.