por Rafael Saralegui
01 Diciembre de 2017 18:03Los testimonios que prestaron varias mujeres gendarmes el jueves último en la causa por la que se investiga las circunstancias de la muerte de Santiago Maldonado generan varias dudas por la versión oficial de cómo se produjeron los hechos el 1° de agosto, que terminaron con el joven tatuador desaparecido luego de la represión de la fuerza de seguridad en la Pu Lof en Resistencia en el departamento Cushamen, en el Norte de Chubut.
Este viernes se cumplen cuatro meses de la fecha de la desaparición de Santiago, pero no se puede considerar aquel día como el de la fecha exacta de la muerte, porque la autopsia no estableció dónde ni cuándo murió. El informe sostuvo que Maldonado murió a raíz de una asfixia por sumersión, sumado a un cuadro de hipotermia.
Ayer, en un comunicado, la familia del joven sostuvo que “son momentos muy tristes marcados por un contexto muy complejo. Debemos enfocarnos en la búsqueda de Verdad y Justicia. Creemos que es necesario colocar nuestra atención en las medidas de prueba pendientes en la causa y que son primordiales para esclarecer la desaparición y muerte de Santiago (declaraciones testimoniales, reconstrucción del hecho, peritaje del lecho del río, entre otras)”.
La familia de Santiago sigue pidiendo medidas de prueba.
En esa línea de tratar de reconstruir cómo fueron los hechos, el juez federal Gustavo Lleral ordenó la declaración como testigos de varias mujeres gendarmes, que participaron del desalojo de la ruta 40, que había sido cortada el día anterior, y que también ingresaron en el predio cuando los mapuches escapaban hacia los cerros de la represión de los efectivos de la fuerza de seguridad.
Uno de los datos importantes que aporta la gendarme Yanina María del Carmen Saldaño es que a ella le ordena el sargento Yucra que hiciera filmaciones y tomas fotográficas de todo el procedimiento. Se lo ordenan apenas llega con sus compañeros en un camión a la zona del conflicto. Lo llamativo es que la Gendarmería nunca aportó en la causa filmaciones ni imágenes.
Algunas de las fotos que se conocieron fueron publicadas por la prensa o trascendieron a través de las redes sociales. Una de esas fotos se publicó en Página 12 y se lo ve a Santiago cerca de una de las casas que hay en el predio, cuando se presume que corre hacia el río para escapar de los gendarmes. Otra de las gendarmes que declara el jueves, Dagma Beatriz Pérez, confirma que su compañera Saldaño tenía la cámara del escuadrón y estaba encargada de filmar todo el procedimiento.
Echazú es asistido dentro del predio de los mapuches.
Pérez, al igual que otra de las gendarmes, confirma que en la ruta resultó herido en la cabeza de un piedrazo uno de los suboficiales, de apellido Yáñez. La enfermera Rita Elizabeth Arjona confirma que Saldaño era la que estaba encargada de realizar las fotos y las filmaciones. Arjona declaró además que le hizo un vendaje en la cabeza a Yáñez, después de haberlo visto agarrarse la cabeza ensangrentada después de haber recibido un piedrazo por parte de los mapuches que abandonaban la ruta y se metían en el predio cruzando los alambres y por la tranquera.
Arjona relata además, que cuando ya está dentro del terreno que ocupan los mapuches, puede ver al Cabo Primero Ramos haciendo curaciones al subálferez Echazú, que también tenía sangre en la cara. Una de las fotografías que se conocieron se lo ve a Echazú cuando regresa desde el río, cerca de la zona donde se supone que estaba Santiago. En esas fotos está ensangrentado. De los testimonios que dan las mujeres gendarmes el jueves, ninguna dice haber visto a Echazú herido en la ruta. Esa era la versión oficial, hasta ahora, que Echazú había sido herido en la ruta, pero que por la adrenalina, había seguido persiguiendo a los mapuches. Pérez y Arjona ingresaron juntas en el predio, después de hacerle un vendaje a Yañez.
Una gendarme confirma que Noceti estaba en la ruta.
Ya en el terreno lo ven a Echazú herido, bastante después de haber atendido al otro gendarme. Echazú es el único imputado en el expediente y por eso su abogado participó en todas las declaraciones. El gendarme dijo que resultó herido en la ruta, pero según fuentes de la causa, una de las hipótesis es que pudo haber sido herido en el río. El mapuche Matías Santana declaró haber visto cómo varios gendarmes golpeaban a Santiago y lo subían a un vehículo de la Gendarmería.
Otra de las gendarmes que declara como testigo, Romina Gisel Voelkli, confirmó que en la ruta 40 estaba el jefe de Gabinete de Patricia Bullrich, Pablo Nocetti, cuando había sido detenido el coche de dos mujeres de la comunidad. Dijo que pensaba que era una persona importante porque venía en un auto oficial. Dijo que habló con las mujeres mapuches y que luego se acercó hasta la tranquera del predio. Y aunque entonces no lo conocía, lo identificó cuando vio su foto en un noticiero, cuando estaba en el escuadrón.