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Más de 7.000 médicos murieron en el mundo por Covid-19: la situación en la Argentina es cada vez más preocupante

Los profesionales de la salud ya advirtieron que cada vez hay menos personas e insumos para atender a los infectados en nuestro país.

03 Septiembre de 2020 15:41
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Según un reciente análisis de Amnistía Internacional, desde que comenzó la pandemia del coronavirus, al menos 7.000 profesionales de la salud murieron en todo el mundo tras contraer el virus mientras trabajaban.

De hecho, solo en México hay al menos 1.320 fallecimientos confirmados, lo que significa que es la cifra más alta para un solo país, aunque se registraron también números elevados en Estados Unidos, con 1.077 profesionales de salud fallecidos, mientras que en Brasil hubo 634 víctimas fatales.

En base al estudio de Amnistía Internacional, en estos dos países se dieron tasas de infección y fallecimiento que han sido altas durante toda la pandemia, así como también hay cifras alarmantes en Sudáfrica (240) e India (573), donde las tasas de infección se han disparado en los últimos meses.

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Según datos del Ministerio de Salud de la Nación, en Argentina, hasta el 26 de agosto 23.248 trabajadores de la salud resultaron contagiados de COVID-19 y 80 de ellos fallecieron.  

"Es necesario responder y atender los reclamos del personal de salud ante las dificultades que atraviesa el sistema en estos momentos. Trabajadores, trabajadoras, sindicatos y asociaciones de la salud en todo el país se han manifestado ante la falta personal y de equipos de protección; y bajos salarios y presupuesto. El Estado debe hacer su mayor esfuerzo para proporcionar todas las herramientas necesarias a quienes están salvando vidas. Y los ciudadanos debemos ser solidarios y empáticos con quienes están en la primera línea de respuesta a diario”, señaló Mariela Belski, directora ejecutiva de Amnistía Internacional Argentina. 

Por su parte, desde la Federación Sindical de Profesionales de la Salud de la República Argentina (FESPROSA) indicaron que la decisión de abordar la agenda de salud no puede esperar al fin de la pandemia, dado que el aumento de los contagios y la mortalidad en el personal de salud exige una respuesta integral centrada en los trabajadores.

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De hecho, en un comunicado denunciaron que a pesar de que el Comité Nacional de Gestion de Crisis (COE) dio el pasado 18 de agosto una serie de recomendaciones para paliar la grave situación que están viviendo los equipos de salud, lo cierto es que todavía ninguna de ellas fueron comunicadas a las autoridades sanitarias provinciales ni publicadas en la página del Ministerio de Salud.

Del mismo modo, desde la federación explicaron que la prolongación de la pandemia no solo agotó a los equipos sanitarios, sino también a los recursos del Ministerio de Salud de la Nación. "No hay partidas para abrir las paritarias, ni prolongar el bono hasta fin de año. También será necesario adquirir más reactivos y equipos de protección personal. Entrar en la fase más crítica sin recursos humanos ni monetarios puede traer consecuencias inimaginables", sostuvo Maria Fernanda Boriotti, presidenta de Fesprosa.

De igual manera, desde el área de prensa de la federación explicaron que este martes se llevó a cabo una reunión entre "una sociedad científica y un grupo de trabajadores invitados por el Ejecutivo nacional", y que allí el presidente de la Nación, Alberto Fernández, concluyó que la única salida es hacer más estrictas las medidas de aislamiento social obligatorio.

Sobre esto, explicaron que desde Fesprosa siempre acompañaron las resoluciones dictadas por la autoridad sanitaria, pero que sin embargo en esta etapa hay que hacer notar que sin una intervención decidida en el punto débil de la cadena, el de los trabajadores de salud, "toda acción será insuficiente".

Las once recomendaciones

Circular información de casos de trabajadoras y trabajadores de la salud positivos, para Covid-19 fallecido y aislado en su entorno para que las organizaciones participantes del COE podamos intervenir apoyando a los y las compañeras en situación de aislamiento y sus familias. Mantener de manera estricta la separación de los ámbitos Covid y no Covid en todos los establecimientos de salud.  Eximir de tareas a las y los trabajadores con co-morbilidad en función del alto riesgo que les produce para su salud en el marco actual de la pandemia, atento que como trabajadorxs esenciales no pueden hacer uso de las licencias x Covid-19 . Realizar de manera regular el relevo de personal para otorgar las licencias a los grupos de riesgo. Promover el testeo regular de todo el personal con los diversos métodos disponibles, tanto para evaluar seroprevalencia como para detectar y aislar a los positivos asintomáticos. Promover acciones de cuidado de la salud mental, sobre los grupos con compañeros y compañeras con casos positivos. Extremar el cuidado en el uso de los EPP promoviendo su puesta y retiro en ámbitos adecuados. Extremar dicho cuidado en las áreas comunes manteniendo los protocolos de uso de barbijo y distanciamiento en los mismos. Refuncionalizar los comités de crisis con la incorporación de las delegaciones gremiales en todos los niveles. Avanzar en una reparación integral para el grupo familiar del fallecido ya que la particularidad de un deceso por COVID 19 supone una situación altamente angustiante en el contexto del aislamiento por la pandemia. Proteger a los y las trabajadores/as evitando la extensión de la jornada laboral dentro y /o fuera del establecimiento en pos de prevenir el desgaste laboral.
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