Priscilla Arce, de 16 años, y su novio Hugo Ariel Aranda, de 19, fueron hallados muertos en una cava de la localidad santafesina de Marcelino Escalada, y se investigan las circunstancias del hecho, ya que ninguno de los cuerpos presentaba signos de violencia.
Si bien la muerte de la adolescente comenzó a investigarse como un femicidio, el fiscal Guillermo Persello, a cargo del caso, reveló que los estudios forenses preliminares indican que murió por "asfixia por sumersión" y que no se detectaron lesiones. La autopsia del joven aún no se efectuó.
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El hecho comenzó a investigarse el sábado luego de que los padres de Priscila efectuaran una denuncia por fuga de hogar. Ayer, el celular de la menor y el de su novio fueron encontrados en una casilla precaria, que se halla en la cava, la cual suele ser utilizada por recolectores de cartones.
Con ayuda de perros adiestrados y de buzos tácticos, los pesquisas encontraron un cuerpo flotando en el agua que llenaba la cava, el cual fue reconocido por los padres de Priscila. Horas después, en el mismo lugar, hallaron a Hugo.
Por el momento, la causa está caratulada como "averiguación de causales de muerte", ya que según el fiscal Persello "no se está a priori frente a un hecho violento ni de ninguna situación enmarcada en violencia en la pareja".
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"Se pidieron informes sociales pero no había denuncias ni ninguna cuestión que indique que estemos frente a un caso de violencia de género", agregó aunque aclaró que "en este tipo de casos, tratándose de una pareja y de una menor, los protocolos indican que se tiene que investigar como un femicidio".
Persello aclaró que "no se descarta ninguna hipótesis" y que los teléfonos celulares secuestrados están siendo peritados. Además, se recolectaron muestras de las viviendas de ambos jóvenes.