Edenor y Edesur deberán pagar una multa de más de dos millones de pesos por haber aplicado cargos ilegales en la facturación a un nutrido grupo de usuarios de ambas distribuidoras eléctricas. El resarcimiento será de $8.000 por cada cliente afectado y fue oficializado este jueves, luego de la sanción formalizada ayer por el Ente Nacional Regulador de la Electricidad (ENRE).
Las multas fueron oficializadas este jueves mediante dos resoluciones publicadas en el Boletín Oficial, que precisan que el resarcimiento de Edenor y Edesur deberá ser de $8.000 por cada cliente al que afectaron al aplicar “cargos ilegítimos en la facturación” entre 2017 y 2020. En total el ENRE recibió 297 denuncias, de las cuales 251 corresponden a Edesur y 46 a Edenor.
El ENRE indicó que tras la sanción a ambas distribuidoras eléctricas se resolvió “una problemática expuesta por la Comisión de Usuarios Residenciales” que fue “ignorada por la gestión anterior”. Según precisaron, las localidades más afectadas por la facturación ilegal fueron la Ciudad de Buenos Aires, Lomas de Zamora, Lanús y Quilmes.
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Los reclamos comenzaron en 2017 y se extendieron hasta inicios de este año, a partir de advertir que en las facturas del suministro eléctrico se incluían cargos por consumos que no fueron medidos de forma adecuada. Según las dos empresas, esa falla se debió a problemas técnicos de los medidores.
CÓMO SE DEVUELVE EL DINERO
Ni Edenor ni Edesur realizaron las pruebas de contraste, tal como establece el reglamento, para determinar cuáles eran los problemas de esos medidores. Sin ese testeo es imposible determinar el monto que se le debe devolver al cliente mediante una nota de crédito o débito. Esa va a ser la modalidad mediante la cual se hará la devolución de $8.000 a cada cliente afectado.La suma de todos los clientes afectados representa los más de 2 millones de pesos que deberán pagar ambas empresas.
“Edenor y Edesur aplicaron dicho cargo sin realizar la prueba de contraste”, sostuvieron desde el ENRE, y aclararon que eso dio lugar a un “notable incremento en el monto de las facturas” que “en algunos casos se volvieron impagables”.
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Según el ENRE, “la mayoría de los usuarios y usuarias debieron hacer pagos parciales y que, a las deudas acumuladas, se les fueron generando intereses”.