Después de haber estado tres días en estado de coma, esta mañana murió Nicolás Berdala, el joven de 16 años que recibió un ladrillazo en la cabeza por parte de una patota. El hecho sucedió el domingo pasado a las 6 de la mañana, en la localidad bonaerense de Martín Coronado, Pilar.
Nicolás falleció luego de estar tres días en estado de coma.
El caso que conmocionó al país
Nicolás salió de un cumpleaños de 15, cuando se cruzó con una patota de jóvenes que comenzaron a hostigarlo. Luego de varios insultos, un integrante de la banda, identificado como Lucas Núñez (17), agarró un ladrillo de la calle y se lo arrojó en la cabeza.
Luego de la gresca, a las 7 de la mañana, Berdala regresó a su casa, le contó lo sucedido a su madre y se fue a dormir. Al mediodía se despertó para almorzar con la familia, pero acusó “estar cansado” y regresó a la habitación para “dormir la siesta”.
Horas mas tarde, los padres fueron a despertarlo, pero el menor no reaccionaba. Lo llevaron rápidamente al hospital de Pilar y por su grave estado de salud lo derivaron al sanatorio privado “Nuestra Señora de la Merced”, donde quedó internado en estado de coma.
Núñez, el principal acusado de arrojar el ladrillo, está detenido en un centro de menores. Con el reciente deceso de Nicolás, la causa será recaratúlada a “Homicidio”.
Un mensaje mafioso
Luego del hecho que causó la muerte del joven, el acusado dejó un mensaje a su cuenta de Faceook, donde se alardeaba de “haber lastimado a Nicolás”.
El lamentable mensaje de Lucas.