Nacho Vegas viene a la Argentina por tercer año consecutivo. Su último EP se llama “Canciones populistas”. El título suena provocador en una época en la cual desde Mauricio Macri hasta el último de sus subsecretarios llaman a “desterrar el populismo”.
Hoy mismo, el presidente dijo: "Salir de años de populismo no es fácil". A horas de sus nuevos conciertos (se presentará el sábado 27 en Hispano, de La Plata, y el domingo 28 en Ciudad Cultural Konex, en Buenos Aires), y en medio de una gira latinoamericana que pasó por Colombia y Perú y que pasará por Chile, la Argentina y Uruguay, el español dialoga telefónicamente con BigBang sobre su música, su compromiso político y el papel del viejo y querido rock en todo eso.
Para Nacho Vegas, "Macri es bastante parecido a Rajoy".
- ¿Sos consciente de los profundos cambios políticos y sociales que hubo en la Argentina desde su visita del año pasado a esta de ahora?
- Estoy muy atento a lo que ocurre allá en la Argentina con Macri, que es de extrema derecha con la cara un poco lavada, que combina alguna reforma cosmética con recortes brutales en diferentes sectores sociales para que no parezca lo neoliberal que realmente es. Macri es bastante parecido a (el primer ministro español Mariano) Rajoy. Ojalá que haya una alternativa en La Argentina: hay un bipartidismo eterno que ojalá se rompiera por algún lado. Y ojalá hubiera un populismo no como el de los Kirchner, un populismo basado en los trabajadores, en el movimiento estudiantil, un movimiento cultural...
- ¿Sabías que aquí para el Gobierno decir "Populismo" es algo así como hablar de la suma de todos los males?
- “Populismo” es una de las palabras de esas que se ha resignificado en el ámbito político y que se ha desacreditado y la ha aprovechado mucho la derecha para desacreditar cualquier alternativa al neoliberalismo. La derecha es la que ha practicado el populismo más y mejor. Tienes que ver el auge de Donald Trump o la extrema derecha que está ahora en Europa. Fíjate cómo en sus campañas electorales apelan a bobadas y tonterías para tener horas de pantalla.
- El año pasado viniste en plena campaña electoral hacia el ballotage. Justo en ese momento Daniel Scioli había viajado a Italia en medio de las inundaciones de la provincia de Buenos Aires y cuestionaste el gesto desde el escenario...
- Así es. Estaba tocando en Bogotá cuando me enteré de aquel viaje de Scioli y, en verdad, me impresionó mucho. Él tenía que estar con la gente. Eso revela la catadura de esta gente. Es que Scioli representaba al empresariado y Macri es directamente el empresariado.
- Donaste las regalías de tu disco a las organizaciones que luchan contra los desahucios (desalojos) en España, a la gente que no puede pagar las cuotas de las hipotecas por causa de las indexaciones constantes, o porque se quedaron sin trabajo... ¿Cómo está esa lucha hoy en día?
- Estoy en contacto con las diferentes plataformas, intentando colaborar con ellas en la medida en que me es posible. Hoy en día ha perdido tal vez cierta visibilidad, bueno, porque los bancos no son tontos y se dieron cuenta que los desahucios con la policía yendo a patearle la puerta a casas de familia no les convenían tanto. El movimiento contra los desahucios sigue haciendo un gran trabajo, que ha cambiado un poco la agenda política y la agenda de los medios.
-En tu país directamente te pusiste la camiseta y empezaste a militar en Unidos Podemos...
-Estamos es un horizonte de cambio. El camino es más lento y más largo de lo que esperamos. El camino es bastante triste porque se perdieron bastantes votos con respecto a la elección anterior. Ahora se trata de volver a movilizar a la gente, no tanto con maquinarias electorales, sino de recuperar el poder popular. Nosotros los que somos de izquierdas siempre sabemos que vamos a perder, pero estamos enfrentando al PP, que entendemos que tiene los días contados.
-Es un poco inusual ese tipo de compromiso en un músico de rock...
-Si vamos a la década de los 50, cuando el rock empezó, hubo una transición desde el folk, que era la música de las clases populares, hacia una música con valores más egotistas, más individualistas, si quieres, que al final devino en el rock 'n' roll. Todo eso era bastante transgresor en su momento, y tenía un espíritu de rebeldía que era muy necesario, pero que fue bastante fagocitado por el mercado. Los artistas que hacemos rock tenemos que darle un gesto, una voluntad a la música que hacemos. Si nosotros no le damos una dimensión política a nuestra música, ten por seguro que se la van a dar otros. La despolitización de la música le conviene al sistema. Por lo tanto tenemos que ser conscientes y estar comprometidos con la realidad. No hablo de hacer letras y canciones políticas necesariamente, sino de tener gestos de compromiso con la realidad, sobre todo cuando es tan llamativa como la vuestra o la nuestra.
-A su vez, manejás una ironía diferente a la de aquellas canciones "comprometidas" algo panfletarias de los 60...
-Mucha parte de la canción de autor de los 60 s pecaba de excesiva solemnidad, y eso echó pafuera a otras generaciones, que lo vieron como un coñazo. Por eso me gusta apelar a Phil Ochs, porque es un músico que apeló al humor de una manera muy diferente en una canción política. El humor ha sido utilizado también de una manera no irónica pero cínica. Una canción marxista como "El pueblo unido, jamás será vencido", tal vez ahora no tiene más sentido. Yo crecí de adolescente con canciones que respiran a marxismo, pero también muchísimo sentido del humor.Lo que pasa es que carecemos de nuevos himnos, puede que surjan. No es lo mismo venir de una dictadura franquista como venir de un régimen neoliberal que instauró una hegemonía basada en la despolitización de la sociedad.
-¿Se ha latinoamericanizado España, se parece más a países como el nuestro?
-Bueno, sí... No es sólo que están echando a la gente de sus casas. La gente apenas tiene trabajos y trabajos precarios, y esto recién empieza porque nos enfrentamos a años de recortes brutales. No podemos decir "somos del Primer Mundo". Es un escenario que nos permite definitivamente enfatizar mucho más con vosotros.
-¿No extrañás un poco la época en la cual se dedicaba más a los temas más clásicos del rock: el sexo, los desengaños amorosos, la experiencia de las drogas?
-Sucede que por ahí una parte del público te dice: “Te preferíamos cuando eras yonqui” (risas). Nunca nos creímos demasiado lo del Sexo, droga y Rock 'n' Roll. Creo que nunca me lo tomé demasiado en serio. Todos tuvimos placeres más o menos tormentosos. He hablado de ello de una manera real. Cuando hablaba de relaciones tortuosas, hablaba de relaciones enmarcadas en un mundo hostil.Cuando hablé de las drogas las enmarcaba en un mundo que hacía difícil las relaciones afectivas y las relaciones colectivas.