25 Junio de 2018 07:43
La familia de Valentino Ladislao debe 60 mil pesos a Edesur. La empresa decidió cortar el servicio, pese a que sabía que allí vivía una persona electrodependiente. De este modo decrietó la muerte de un niño de ocho años. El corte duró más de 12 horas y el menor no logró soportar la espera sin la ayuda de los equipos que lo mantenían con vida. Valentino sufría de una parálisis cerebral luego de haber pasado por un accidente con un vidrio que le afectó el corazón.
La empresa no brindó servicio por 12 horas.
Pese a que Edesur sabía que en ese hogar, ubicado en Villa Centenario, en Lomas de Zamora, existía un niño electrodependiente, la decisión de cortarles el servicio se efectuó igual y Valentino desmejoró su estado de salud hasta morir, cuando era llevado de urgencia al hospital.
"Ese día llamé muchas veces a Edesur para informarles que yo tenía un nene electrodependiente y la respuesta de ellos fue que yo tenía una deuda y que no me podían decir cuándo iba a venir la luz. Me vino 60 mil pesos que no los pude pagar. No puedo pagar esa cantidad de plata", expresó con una angustia incalculable su mamá, Mariana Medina, en diálogo con Canal 26.
La muerte de Valentino sucedió cuando se cumple un año de la sanción de la promulgación de la Ley de Electrodependientes, que les prohíbe a las empresas cortar el servicio para estos casos especiales. Pese a que se promulgó la Ley, sobre 3.800 personas electrodependientes, sólo fueron incorporadas 90 y hay 2200 solicitudes pendientes aún sin resolver.
Valentino tenía 8 años y sufría parálisis cerebral.
Según su familia, el pequeño de ocho años tenía “todos los papeles” que respaldaban que su vida dependía de la electricidad, pero la empresa no tuvo ningún tipo de reparo o de piedad y lo dejó morir.
"Edesur estaba al tanto de que en esta dirección había una criatura electrodependiente", expresó Verónica, la tía de Valentino a El Intransigente.
El corte comenzó a la mañana y se mantuvo todo el día. A la noche la familia advirtió que pasaba una cuadrilla de empleados de la empresa y fue cuando se les suplicó que les dieran una solución ante la desesperación de ver a Valentino desmejorar cada vez más. “Ni siquiera nos dieron un grupo electrógeno”, relatan sus familiares.
"Cuando mi hermana volvió a su casa siguió tratando de reanimar a Valentino de forma manual hasta que tuvo que salir corriendo y no llegó al hospital Evita de Lanús. Valentino llegó sin vida. Esto pasó a las nueve de la noche y a las diez volvió la luz", dijo Verónica.
QUÉ DICE EDESUR
Fuentes de Edesur aclararon sobre el tema que se trató de un corte programado por obras en la zona. A su vez, aseguraron que no sabían que en esa casa vivía una persona electrodependiente, ya que esa situación no había sido registrada.
“El trámite para anotar a una persona electrodependiente hay que hacerlo en la oficina comercial. En el call center pueden decir cualquier cosa, el tema es que la persona esté registrada. En esos casos, cuando el electrodependiente figura en nuestro sistema, el suministro está garantizado”, dijeron en la distribuidora.