Los choferes de ómnibus de las compañías de larga distancia Flecha Bus, Vía Bariloche, San José, y Tata realizarán a partir de esta medianoche un paro de actividades, por "incumplimiento" de pago de la suba salarial de 21%, que había dispuesto el Ministerio de Trabajo ante la falta de acuerdo en la paritaria.
Los trabajadores reclaman una suba del 21% que no se les pagó.
El secretario de prensa de la Unión Tranviarios Automotor (UTA), Mario Caligari justificó la medida de fuerza tras el incumplimiento de la resolución de la cartera de trabajo y advirtió que el paro "puede ser por 24 o por 48 horas y se va a levantar cuando cumplan con la paritaria". En tanto, si la situación no se resuelve, se espera que para el martes 12 de septiembre paren las empresas Chevallier, Pullman, Urquiza y Sierras de Córdoba. Finalmente, para el jueves 14 de septiembre las empresas Crucero del Norte, Veloz del Norte, Ruta Mar, Plusmar y Andes Mar se adherirán a la medida de fuerza.
Tras esta decisión, la Cámara Empresaria de Larga Distancia (CELADI) indicó que "no existe a la fecha ningún acuerdo firmado entre las cámaras representativas de la actividad y el gremio".
CELADI recordó que junto con la Cámara Argentina de Transporte de Pasajeros (CATAP), presentaron el 28 de agosto un escrito administrativo recurriendo ante el Ministerio de Trabajo la resolución 595/2017 de esa cartera que fijó el aumento salarial de 21 % para los trabajadores del sector "por considerar la misma de imposible cumplimiento".
Por lo tanto "hasta tanto el Ministerio de Trabajo no se expida sobre este recurso la resolución de pago resulta en abstracto y las empresas no se encuentran incumpliendo ningún acuerdo", dijo CELADI en un comunicado.
La entidad llamó "a la reflexión a la autoridad sindical, a fin de que depongan una acción que no hará más que perjudicar a los miles de argentinos que deben llegar a sus hogares en todo el país, además de acrecentar la crisis financiera y económica de las empresas de transporte".
Con la paritaria vencida el 30 de abril, la UTA amenazó en reiteradas oportunidades con la posibilidad de un paro de alcance nacional, ante lo cual se determinó la suba de 21%, en tres tramos (agosto, octubre, y enero de 2018).
CELADI y CATAP se escudan argumentando que si no se logró alcanzar un acuerdo salarial "no es por falta de voluntad" sino "por la imposibilidad de acceder al mismo" debido a que las empresas de larga distancia "no han podido superar la profunda crisis estructural en la que se encuentran inmersas".