Finalmente este jueves inició con varias líneas de colectivos que no salieron a realizar sus recorridos habituales en el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA) hasta que no se apaguen "lo salarios en los montos acordados". De esta manera, los colectivos 1, 2, 4, 10, 12, 15, 17, 19, 22, 29, 32, 33, 34, 37, 39, 41, 42, 45, 46, 47, 49, 53, 55, 59, 61, 62, 63, 64, 65, 67, 68, 70, 71, 75, 85, 86, 87, 88, 90, 92, 93, 96, 97, 98, 99, 102, 103, 105, 106, 109, 110, 113, 114, 118, 119, 123, 124, 126, 128, 129, 133, 136, 140, 143, 145, 148, 151, 152, 153, 154, 158, 159, 160, 163, 166, 169, 172, 174, 176, 178, 179, 180, 181, 182, 184, 185, 193, 194 y 195 no estarán disponibles esta jornada.
Desde la Unión Tranviarios Automotor (UTA) habían informado que "el sector empresario se niega a pagar lo salarios en los montos acordados, a pesar de que los Gobierno Nacional y Provincial aportaron en subsidios la suma de más de $122.000.000.000, con un aumento respecto al de los meses anteriores de 42% y aumento del valor del pasaje que pagan los usuarios en un 250%". De esta manera, resaltaron que "los montos recibidos no son suficientes para cubrir los costos".
Lo único que podría revertir esta situación sería el depósito de las sumas que los trabajadores les reclaman a las empresas como parte de un aumento salarial. El gremio exige que al sueldo básico de marzo se le incorpore el bono de $250.000 abonado en febrero -mes en el que el sueldo inicial alcanzaba los $737.000-. Así, los trabajadores piden cobrar un total de $987.000. El martes 10 de abril hubo una reunión entre las empresas y el gremio, pero no se llegó a un acuerdo.
Por este motivo, se definió una nueva audiencia virtual para las 11hs del lunes 15 de abril con el objetivo de "extremar esfuerzos" para acercar posiciones. Sin embargo, los empresarios ya confirmaron que no están en condiciones de afrontar ese pago. En consecuencia, se espera que el paro de colectivos sea un hecho. El vocero del gremio, Mario Calegari, explicó que "si aparece la plata estamos dispuestos a trabajar", en declaraciones a TN.
Desde la comisión directiva del gremio explican que hay más de 400 líneas, gestionadas por empresas agrupadas en cinco cámaras, AAETA, CEAP,CETUBA,CTPBA y CEUTUPBA. En ellas se trasladan 9 millones de pasajeros. Los choferes acudieron a sus lugares de trabajo, pero esperan el depósito de las sumas que reclaman, de lo contrario, los recorridos no saldrán. "Ahora niegan lo acordado, intentando borrar con el codo lo que se escribió con la mano", denunciaron desde la UTA.
El sector empresario, en tanto, reafirmaron, que no hay sumas adeudadas y subrayaron que quien no trabaje, "además de las sanciones que puedan corresponder por falta injustificada", no cobrará su salario completo. "El sector no asumirá compromiso alguno que luego no pueda garantizar el cumplimiento efectivo", señalaron. Desde ese punto de vista, comunicaron: "Las empresas han perdido capital a lo largo de estos años y sin capital no hay empresas, ni fuentes de trabajo".
En ese sentido, remarcaron que "si por cualquier motivo en las mencionadas circunstancias se decidiera que el sector empresario deba abonar otro salario que no sea el homologado en el acuerdo del 2 de febrero próximo pasado, debemos señalar que se carecerán de los recursos para afrontar el mismo". Toda la situación derivó del último encuentro, vía Zoom, entre los representantes de la UTA, las cámaras empresarias y la Secretaría de Transporte de la Nación. Allí todos ratificaron sus posiciones.
Una empresa de colectivos no se sumó al paro y denunció ataques a sus unidades
Por otra parte, una empresa de colectivos que decidió no sumarse al paro que se lleva a cabo este jueves en la Ciudad y el Gran Buenos Aires, denunció que algunas de sus unidades fueron atacadas y publicó las imágenes en sus redes sociales. Se trata del Grupo DOTA que, a través de la red social X, dio a conocer que algunos colectivos sufrieron agresiones que fueron llevadas a cabo por "los vándalos de siempre", según indicaron desde la empresa.
Desde DOTA denunciaron que algunas de sus unidades sufrieron pedradas en sus ventanillas y parabrisas, y otros daños menores en las carrocerías, minutos antes de que comenzara a regir la medida de fuerza que promueve la UTA por el reclamo salarial, a la que la empresa no se sumó. Horas antes, desde DOTA habían confirmado que iban a "garantizar el servicio" argumentando que "la totalidad del personal tiene acreditado el importe total de sus haberes correspondiente al convenio homologado de 737.000 pesos de valor inicial". "Los vándalos de siempre", fue la acusación que lanzó la empresa de colectivos en una publicación que hicieron en X.