Residentes, concurrentes y profesionales de la salud llevaron a cabo un paro y marcharon esta mañana en repudio a la represión de la policía de la Ciudad ocurrida ayer sobre quienes querían ingresar a la Legislatura porteña para evitar que se votara un proyecto de ley que regula la actividad en la Capital Federal. Finalmente, la medida fue aprobada por los legisladores de Cambiemos, ya que varios diputados de la oposición no pudieron votar, porque habían salido a pedir que frenara la represión.

La norma en cuestión es altamente criticada por los profesionales de la salud, ya que argumentan que favorece la precarización laboral. Sin embargo, fue aprobada en la Legislatura en una sesión que incluyó gritos e insultos dentro del recinto e incidentes en la puerta del Palacio, donde finalmente la Policía tiró gas pimienta para dispersar a los manifestantes.

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Después de los disturbios, varios diputados opositores denunciaron que la medida se votó cuando dejaron sus bancas para intervenir en una fuerte represión que había comenzado contra quienes protestaban en la puerta del recinto.

Tras este grave episodio los médicos residentes y concurrentes porteños anunciaron un paro para hoy y una movilización hacia el Palacio legislativo. De este modo, organizaciones sociales, políticas y estudiantes de medicina se concentraron cerca de las 9 de la mañana en Callao y Corrientes, y cuando iban de camino a la Legislatura, se toparon con un dispositivo policial, por lo que siguieron hasta avenida de Mayo, donde mantuvieron una asamblea para definir el plan de lucha.

Según informó desde su cuenta de Twitter el diputado porteño por Unidad Ciudadana, Javier Andrade, en la reunión se decidió convocar para este lunes un nuevo paro, mientras que además se estableció hacer otra movilización a la Jefatura porteña para recibir una respuesta por la aprobación del proyecto. La convocatoria contó con la presencia de cientos de manifestantes, y estuvo cargada de banderas, carteles y cantos.

Entre los artículos del proyecto que los residentes cuestionan, está la "legalización de jornadas laborales extenuantes" y el "sostenimiento del régimen de concurrentes", es decir, médicos que cumplen las mismas tareas que los residentes pero sin remuneración.

Los profesionales, a través de un comunicado, exigieron también que "se establezcan los mismos derechos y obligaciones que el conjunto de los trabajadores de la salud, siendo llamados como tal".

Asimismo, señalaron que la iniciativa oficial "cristaliza la explotación laboral de les residentes reconociendo la carga horaria mínima de 36 horas" semanales (6 horas semanales más que el resto de los profesionales), y la contemplación de un máximo de 64 horas "perpetúa un régimen laboral de explotación, muy por encima de cualquier convenio colectivo".

Ante esta situación, la Sociedad Argentina de Pediatría expresó su repudio y preocupación frente a la represión ejercida sobre los médicos residentes y concurrentes de los Hospitales de la Ciudad, debido a que este hecho "representa un arrebato a la integridad de la comunidad médica y al justo derecho de manifestarse".

La iniciativa del gobierno de Horacio Rodríguez Larreta había ingresado hace menos de dos semanas a la Legislatura y presentada oficialmente por la ministra de Salud, Ana María Bou Pérez. Antes de eso, los médicos residentes y recurrentes ya habían dado a conocer sus críticas