Julio es el mes del día de la Seguridad Vial y, por ende, un momento ideal para recordar que una de las causas de mayor impacto en los accidentes viales es el uso del celular al volante.
De acuerdo a un informe de la ONG Luchemos por la Vida, desde el 2007 a la actualidad el uso de celular por parte de los automovilistas se cuadruplicó.
Así, actualmente de los 1.400.000 vehículos particulares que circulan por Buenos Aires diariamente, aproximadamente 240.800 conductores utilizan un celular mientras conducen.
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Si bien en nuestro país utilizar celular al volante está penado por la Ley de Tránsito 24.449, esta costumbre se identifica como la causa más frecuente de distracción entre los conductores.
De acuerdo con un estudio llevado adelante por la Agencia Nacional de Seguridad Vial (ANSV), el porcentaje de distracción al volante a causa del uso del celular creció un 27%.
Incluso si se utiliza el modo manos libres, hablar por teléfono mientras se maneja determina que se pierda la capacidad de concentración necesaria para conducir y no se mantenga una velocidad constante, ocasionando que la distancia de seguridad con el vehículo que circula delante no sea la suficiente.
"Según investigaciones en seguridad vial está comprobado que cuando un conductor mira el teléfono durante tres segundos, circulando a 40 km/h que es la velocidad máxima permitida en una calle, recorre 33 metros a ciegas, esto equivale a casi media cuadra con los ojos cerrados, aumentando la posibilidad de tener un accidente"; comenta Franco Taraborrelli, gerente general de la compañía tecnológica especializada en emergencias Ituran Argentina, especializada en auxilio ante accidentes de tránsito.
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Cuando se utiliza un teléfono celular, los conductores pueden observar el entorno que los rodea, pero no procesan la mitad de la información recibida. A esto se le llama "ceguera por falta de atención".
Cada una de las acciones que quitan la vista del camino al momento de manejar impactan en la capacidad del cerebro del conductor para concentrarse al volante. De esta manera, se pierden señales importantes y se enfrentan peligros durante el trayecto, la respuesta y los tiempos de reacción son más lentos, y la posibilidad de involucrarse en un accidente es cuatro veces más alta.
A su vez, los estudios también demuestran que al momento de realizar tareas simultáneas, el cerebro humano disminuye su enfoque, nivel de atención y procesos de toma de decisiones.