18 Mayo de 2018 16:39
Sigue la investigación por el sorpresivo fallecimiento de la periodista Débora Pérez Volpin y los abogados de la familia pidieron que el endoscopista, Diego Ariel Bialolenker, y la anestesista, Nélida Inés Puente, quienes llevaron adelante el procedimiento durante el cual se produjo su muerte en el Santatorio La Trinidad de Palermo, sean citados a declaración indagatoria.
Pérez Volín falleció a causa de una perforación en el esófago que generó un barotrauma.
La decisión fue tomada por Diego Pirota y Deborah Lichtmann, abogados de la familia de la legisladora fallecida el 6 de febrero último. Según explicó Lichtmann, pidieron que se cite a declarar a ambos profesionales debido a que están dadas “todas las condiciones” para que se presenten ante la Justicia.
"Presentamos un escrito ante el juez pidiéndole que los cite a declarar en virtud de que ya se sucedieron todas las declaraciones testimoniales, la documentación que podía conseguirse se consiguió, así que entendemos que están todas las pruebas necesarias para que se haga la declaración", afirmó Lichtmann.
Enrique Sacco, viudo de Débora Pérez Volpin, y el abogado Diego Pirota.
El abogado destacó que "la indagatoria es el acto de defensa de los imputados por excelencia" donde "tienen que ir a defenderse de las pruebas que hay en su contra".
Según el informe final de la autopsia, que se dio a conocer el 11 de abril, Pérez Volpin murió por "una perforación instrumental en su esófago" durante la realización de una endoscopia por "responsabilidad de los dos profesionales" que llevaron adelante la práctica.
En el escrito presentado, la querella afirmó que "si bien al comienzo de estas actuaciones resultaban aún desconocidas muchas de las circunstancias en torno a las causales que produjeron la muerte de la mencionada, a estas alturas del proceso podemos afirmar que nos encontramos con plenas certezas en torno a las mismas".
Débora Pérez Volpin falleció a los 50 años mientras le realizaban una endoscopía en La Trinidad.
En ese marco, en una cronología sobre lo ocurrido el 6 de febrero, advirtieron que "todas las declaraciones testimoniales prestadas en autos y la propia historia clínica dan cuenta que la señora Pérez Volpin ingresó sana al quirófano".
En el escrito, precisaron que el endoscopista "lisa y llanamente la perforó, y el aire que se le insuflara comenzó a expandirse por diversos órganos hasta provocar el colapso e insuficiencia de los mismos".
"Aquella situación no fue advertida por el médico endoscopista, que continuó con el estudio hasta que, en algún momento -muy tardío, por cierto-, la médica Nélida Inés Puente, anestesista, advirtió una desaturación en la paciente", de acuerdo al escrito presentado.
En ese sentido, destacaron que "con sus tantos años de experiencia como anestesióloga, no sólo no supo cómo manejar una perforación endoscópica, tampoco una situación de emergencia, sino que la empeoró, conduciendo a la paciente de manera directa a la muerte".
a familia inició una causa judicial que tramita el Juzgado Criminal y Correccional N° 57.
Y agrega que los terapistas y la cardióloga que asistieron en la emergencia dieron cuenta "de la incapacidad de Puente para manejar la situación". "Por sus acciones así como por las omisiones en que incurrieron, cada uno desde su rol, contribuyeron a empeorar el cuadro hasta provocar la muerte de la paciente de forma violenta", añade el documento.
érez Volpin presentaba una perforación en el esófago.
De esta manera, la familia de Pérez Volpin acusa a los profesionales de completar luego la historia clínica con "inconsistencias, contradicciones y falsedades". La periodista sufrió una perforación instrumental del esófago, es decir, una lesión causada por la práctica endoscópica. Eso generó el ingreso de aire al mediastino, el tórax y el peritoneo.