28 Abril de 2015 07:53
En la noche de ayer murió José Manuel Lastra, de 16 años, quién estaba internado en terapia intensiva desde el 5 de abril, el domingo de Pascua cuando fue atropellado junto a un grupo de amigos. El otro fallecido era su primo Lautaro Juárez, de 19, que había muerto en el acto. Asimismo quedan internados otros dos jóvenes con heridas de gran consideración.
La picada que terminó con dos vidas
"Tenía esperanzas de que se recuperara. El cinco de mayo va a ser un mes de esta pesadilla y el veintinueve, Manuel iba a cumplir años", dijo la madre del joven, Susana Lastra y pidió Justicia por los adolescentes fallecidos y cuestionó al juez de Garantías 4 de Morón, Alfredo Meade, por haber excarcelado al conductor del Nissan Tiida que los atropelló, llamado Diego Nicolás Cuevas (19). Se planea realizar una marcha en reclamo.
José Manuel Lastra tenía 16 años
Como si fuera poco, otro escándalo del caso es que los peritos aseguraron que la sangre del conductor, Diego Cuevas, fue diluida con agua y que, por ello, no puede establecerse si el acusado estaba ebrio. El abogado querellante, Luis Rapazzo se quejó . “Es insólito. Lo único que se puede determinar es el ADN pero esa muestra no sirve para nada más”, agregó el letrado al sostener que la denuncia fue hecha por la jefa de peritos de la Policía Bonaerense.
El impacto de la picada mortal
El hecho ocurrió el domingo 5 de abril pasado a la 7 de mañana sobre la avenida Rivadavia, a la altura de la calle Maipú, de Haedo, cuando un auto atropelló a siete jóvenes que regresaban a sus casas caminando luego de asistir a un boliche de la zona.
A raíz del impacto, Juárez cayó muerto en el lugar y los otros jóvenes resultaron heridos y quedaron tirados en el suelo, entre la vereda y la avenida, según la investigación. Mientras que el auto Nissan Tiida color champagne pegó contra el paredón que separa las vías del tren y salió despedido hacia la calle, donde terminó atravesado de contramano sin el paragolpes delantero, que quedó tirado sobre el asfalto y con daños en su costado izquierdo.
Como consecuencia del accidente, el conductor del auto, Cuevas, quedó detenido a pedido del fiscal del caso Alejandro Jons, pero fue excarcelado unos días después por el juez Meade, quien consideró que se había tratado de un accidente, sin intención.