Uno de los testigos que participó del primer operativo de búsqueda del submarino ARA San Juan aseguró que a los seis días de iniciado el proceso registró lo que consideró como "ruido de casco". Eso se desprende el expediente que maneja la jueza federal de Caleta Olivia a cargo de la investigación de los motivo detrás de la desaparición del navío, Marta Yañez.
El submarino y su tripulación desaparecieron el 15 de noviembre de 2017.
El suboficial declaró ante la magistrada, según consignó el sitio Infobae, que ningún navío había llegado al lugar y que por temor a represalias dentro de la Armada solicitó que se mantenga en reserva su nombre. El "ruido de casco", según le explicaron a BigBang se produce cuando se golpea las paredes del navío de forma contundente con un elemento metálico, como una llave. "Es una forma de comunicarte cuando, por ejemplo, se está sin tensión o sin instrumentos", explican.
El hallazgo del sonarista fue reportado a la Armada, sin embargo el vocero de la Fuerza, el Capitán Enrique Balbi, nunca hizo referencia a él en lo sucesivos partes de prensa que dió sobre la búsqueda del submarino. La situación fue confirmada a este medio también por uno de lo abogados de los familiares de los 44 tripulantes. Desde la Armada no dieron explicaciones por la no comunicación de ese punto.
Había 44 personas a bordo al momento de la desaparición.
La noticia se conoció luego de que el ministerio de Defensa contrató a un especialista para la búsqueda del navío, el venezolano Hugo Marino que cobrará U$D 3,8 millones y prometió hallarlo en menos de 100 días.