De acuerdo a un estudio elaborado por el científico israelí Isaac Ben-Israel, presidente de la Agencia Espacial Israelí y del Consejo Nacional de Investigación y Desarrollo, el coronavirus parece tener un comportamiento uniforme en todo el mundo: la propagación disminuye a casi cero después de 70 días, sin importar país ni las medidas que se tomen para frenarlo.
El especialista asegura que el número de nuevos infectados por día no aumenta a un ritmo constante, y por lo tanto el crecimiento no es exponencial. En Israel, por ejemplo, el pico de pacientes diarios llegó alrededor del día 41 de la pandemia y desde entonces comenzó a disminuir.
Sin embargo, ese modelo no sería sólo aplicable a ese país: Ben-Israel subraya que el coronavirus se comporta así en todos los países donde se registraron infecciones, incluso en Estados Unidos, donde se reportó la mayor cantidad de infecciones y muertes.
Las medidas no importan
El científico también asegura que las medidas que tome cada gobierno para combatir al virus no imponen ninguna diferencia en este esquema: Italia, que impuso una cuarentena estricta y Suecia, que no implementó ninguna, tuvieron curvas de propagación similares.Vale notar que más allá de esto, el primer país registró más de 170.000 contagios que el segundo.
"Algunos pueden afirmar que la disminución del número de pacientes diarios es el resultado del estricto bloqueo impuesto por el gobierno y las autoridades sanitarias. El examen de los datos de diferentes países del mundo pone un fuerte signo de interrogación sobre esa afirmación", señala Ben-Israel.
"Resulta que el fenómeno es similar en todos los países en los que se descubrió la enfermedad, independientemente de sus políticas de respuesta: algunos impusieron un bloqueo severo e inmediato que incluía no sólo el 'distanciamiento social' y la prohibición del hacinamiento, sino también de la economía, como Israel; algunos 'ignoraron' la infección y llevaron una vida casi normal, y algunos adoptaron inicialmente una política indulgente pero pronto aplicaron un cierre completo", enumera.
"¿Ha continuado el coronavirus propagándose exponencialmente?. La respuesta es negativa. La propagación del virus comienza a un ritmo exponencial, sin embargo, continúa moderándose y finalmente se desvanece después de ocho semanas más o menos desde su aparición", concluye Ben-Israel.
Así, en la primera fase de la propagación, el porcentaje de nuevos contagiados ascendió a cerca del 30% diario, después de seis semanas disminuyó por debajo del 10% y finalmente una semana después alcanzó menos del 5%.
En ese sentido, el científico recomienda el abandono de las cuarentenas severas ya que "su resultado inmediato es un aumento en el nivel de desempleo y la caída del PIB" y "esto eventualmente conducirá a un aumento de la pobreza y a la pérdida de vidas humanas debido a otras enfermedades".
Al mismo tiempo, Ben-Israel aconseja continuar con medidas más moderadas, como el uso de barbijos, la ampliación de testeos para poblaciones definidas y la prohibición de reuniones masivas.