03 Abril de 2017 07:30
Año 1975. El destino es incierto, aunque es un sitio con playa. Antes de ser quien es hoy y quien fue años atrás, Carlos Solari disfrutó de un verano en la Costa Atlántica. Guitarra en mano, pelo largo y con un viejo auto Mehari, pasó unos días junto a una pareja amiga. Las fotos de aquellos días se conocieron en las últimas horas.
Faltaba aún un año para la conformación oficial de Patricio Rey y sus Redonditos de Ricota. Las imágenes son tiempo antes de ese momento, cuando comenzaría a forjarse una de las bandas centrales para entender el rock nacional. Solari - tiempo después llegaría el apodo de “Indio”-, aún no era el hombre que es hoy: masivo, fóbico de sus fans y millonario.
Las fotos fueron publicadas en el Facebook Virumancia, que administra su esposa, Virginia. Las mostró allí un usuario que las tenía guardadas desde hacía tiempo. Años después vendrían las épocas de rock and roll, música en pequeños lugares y un público reducido, aunque muy fiel. Aún faltaban décadas para la despedida de Los Redondos y los shows masivos en estadios de fútbol. Ni hablar de su etapa solista, acompañado por su banda, Los fundamentalistas del aire acondicionado.
Guitarra en mano, Carlos Solari, en 1975, en algún sitio de la costa atlántica.
Las imágenes son de 1975. Solari estaba junto a una pareja amiga. Habían ido a la playa en un Citroen Mehari. Según relata el usuario, Nahuel Cabrera, también platense al igual que Solari, sus padres, Raúl y “Chiquita”, viajaron junto al músico. Además de las fotos, relata que tiene una artesanía que les regaló el propio Solari.
El comentario que Cabrera acercó a la fan page por donde canaliza la información oficial Solari tuvo cientos de respuestas. El objetivo de él era enviarle, en privado, algunas de esas fotos antiguas, previas a la explosión que provocó en los jóvenes de los años ochenta y noventa la música de Los Redondos. Pero algunas personas le pidieron que publicara al menos algunas. Querían ver cómo era su ídolo mucho antes de convertirse en el hombre de las misas.
Los que siguieron no fueron años sencillos: antes de la recaudación millonaria y los shows masivos hubo que pasar giras por todo el país, en una de ellas por Salta en 1978 se bautizó a la banda bajo el nombre de Patricio Rey y sus Redonditos de Ricota.
“Siempre cuenta mi vieja cuando en tu casa de La Plata sacabas la puerta para hacer de mesa”, relata en el breve comentario el hombre que publica las imágenes. Y un dato llamativo: “Junto a mi vieja hacían una tortilla de polenta”.
A la derecha, de negro y con pelo: Carlos Solari.
Las fotos fueron en la playa, pero el destino no queda del todo claro. Lo cierto es que la relación de Solari con la costa atlántica data de aquellos años setenta en los que fueron tomadas estas mismas imágenes. El destino que elegía el joven músico era Valeria del Mar. Sin ir más lejos, seis años atrás le contó a Mario Pergolini en la Rock & Pop que sus padres se mudaron a esa zona de la Costa Atlántica.
“Dejé de ver a mis padres tempranamente. Ellos se mudaron a la costa y yo me quedé en La Plata, aunque a veces me iba a Valeria del Mar y me quedaba varios meses. Eran épocas difíciles políticamente en La Plata”, comentó en 2011, en aquél reportaje. Según la web especializada en Valeria del Mar “TodoValeria”, los padres del músico tenían allí una casa conocida como “La Trinchera”.
Incluso, en esas épocas ya tenía contacto con la familia de su futuro compañero de banda, aventuras y futuro enemigo público Skay Beillinson. En Valeria del Mar, a poco más de 300 kilómetros de La Plata, administró un pequeño hotel junto al hermano de Skay. También fue su socio en un taller de estampado de remeras y telas. Una historia anterior a la historia que sellaría Solari en la música argentina: que muestra la vida de Solari, mucho antes de ser el Indio.