Con el tatuador Patricio Pioli como acusado, por primera vez llegará a juicio oral una causa por publicación de material sexual privado. La víctima fue la riojana Paula Sánchez Frega, ex pareja del imputado.
El delito del que se se lo acusa es de "lesiones leves calificadas y coacción" ya que, como explicó a Infobae Sebastián Andrada, abogado de la víctima, "al momento de hacer la denuncia la viralización de las fotos y los videos no constituían un delito". Así, "se tuvieron en cuenta otras circunstancias que rodean el caso como la coacción y el daño psicológico".
Esto fue posible ya que la difusión de las imágenes íntimas de Paula llegaron luego de que Pioli la amenazara con publicarlas si no volvía con él. Vale recordar que en la última la reforma del Código Penal efectivamente se introdujo la figura legal que contempla como delito la divulgación de material sexual privado.
En el marco de esta legislación, se pueda sancionar con pena de prisión de 6 meses a 2 años o multa equivalente a 5.000 pesos por día al que, sin autorización de la persona interesada, difunda imágenes o grabaciones con contenido sexual que hubieran sido producidas en un marco de intimidad. Puede existir agravante (con pena de 1 a 3 años de prisión), si el autor del delito tuvo una relación afectiva con la persona afectada o si ésta es menor de edad, y si el delincuente actuó con fines de lucro.
Pioli fue procesado con prisión preventiva -aunque beneficiado con excarcelación- y embargado por 30.000 pesos en el 2017. Si se lo condena a una pena menor a los los tres años ésta quedará en suspenso si no tiene antecedentes penales, o si no comete otro delito.