25 Noviembre de 2015 20:54
Luego de un procedimiento realizado por la Prefectura Naval Argentina, más de 2.000 kilos de meteoritos fueron secuestrados en una casa de la localidad de Quimilí, en la zona rural de Santiago del Estero, a 200 km de la capital provincial.
Se encontraron unas 30 piezas rocosas, envueltas en plástico, enterradas debajo de mosaicos en distintas habitaciones de la propiedad. Los dueños de casa son Milo Prieto, quien se dedica a tareas agrícolas y ganaderas, y su esposa Vilma Torres, una comerciante de muebles.
Un impactante hallazgo en Santiago del Estero.
No se dieron precisiones sobre la procedencia de los meteoritos, pero se presume que fueron sustraídos en Chaco y que se planeaba venderlos en Alemania. Tampoco se reveló aún como llegaron a la casa donde se los encontró.
Aunque la venta de meteoritos se encuentra prohibida por leyes nacionales y provinciales, no es poco común que sean ofrecidos a coleccionistas extranjeros. En Estados Unidos, donde su comercialización es legal, un fragmento de 32 gramos puede llegar a valer 42 dólares y se han pagado hasta 5.500 por una pieza de 21 kilos.