Si bien el vino es una bebida que puede adecuarse a cualquier momento del año, es cierto que existen varietales y temperaturas adecuadas para cada estación.
En principio, es sumamente importante mantener la cantidad de frío ideal para cada varietal, lo cual también ayudará a optimizar los sabores y aromas. Así, los espumantes deben servirse en un rango de 6 a 8 grados, los vinos blancos de 8 a 10 grados, los rosados de 10 a 12 grados y los tintos jóvenes aproximadamente a 14 grados.
Siguiendo la guía de consejos del grupo de bodegas de Molinos Río de la Plata (Cadus Wines, Ruca Malen y Nieto Senetiner), es importante tomar la copa del tallo para que el calor de las manos no se traspase al vino.
Además, se recomienda servir poco volumen por cada copa, para evitar que tome temperatura ambiente, e ir rellenando desde la botella conservada en frappera. Si el vino es dulce, debe tomarse en la temperatura más baja del rango sugerido.
Para días calurosos, los varietales más disfrutables son los blancos Sauvignon Blanc, Semillón y Chardonnay, y los tintos Criolla, Pinot Noir, Merlot y Malbec livianos. Más allá del varietal, es ideal elegir vinos de complejidad baja.
Acompañados
Incorporar vino como ingrediente de cócteles también puede ser una gran manera de beberlo en verano. Un vino blanco fresco seco y expresivo como el Sauvignon Blanc puede combinarse, por ejemplo, con frutos del bosque que destacan la intensidad de los sabores. Lo mismo sucede con la unión del Chardonnay y el pomelo: el vino suaviza las notas más fuertes de la fruta redondeando un cóctel suave y agradable.
El Chardonnay -y también el Torrontés- pueden usarse como materia prima para un clericó, mezclándolos con frutas en una jarra con hielo y dejando reposar unos minutos antes de servir.
Mientras tanto, no hay que tener resquemores en combinar tintos con otras bebidas: con gaseosa de limón, rodaja de naranja y hielo se convierten en un trago ideal para una tarde calurosa.
Finalmente, el espumante brilla en un clásico, el Mimosa, que se prepara mezclando una parte de espumante con una de jugo de naranja en una copa flauta.