13 Octubre de 2016 19:04
Los padres de Lucía Pérez, la adolescente violada, torturada y asesinada en Mar del Plata, se reunieron hoy con el ministro de Justicia, Germán Garavano, a quien le pidieron que los responsables del crimen de su hija "no salgan más" de la cárcel.
Marta Montero y Guillermo Pérez, padres de la adolescente de 16 años asesinada tras ser "sometida a una agresión sexual inhumana", se acercaron esta tarde hasta el hotel marplatense donde se desarrolla el 52 Coloquio de IDEA y mantuvieron una reunión a puertas cerradas con el funcionario nacional.
"Ahora estoy más tranquila porque le pedimos que no salgan más y me respondió que van a hacer todo lo posible y respetuosos de lo que la Justicia diga", sostuvo la mujer.
Los padres de Lucía le pidieron al ministro que los culpables "no salgan más".
En declaraciones a la prensa, Montero dijo que el ministro Garavano "estaba al tanto" del caso del asesinato de su hija y se comprometió a colaborar con la fiscal a cargo de la investigación.
La mujer aseguró que el ministro les advirtió que "hay que tener cuidado porque hay personas que por ahí por dinero, pueden hacer cosas y por eso (el estado) va a estar atentos a todo".
El encuentro tuvo que interrumpirse durante algunos minutos como consecuencia de una indisposición que sufrió la madre la víctima. Cuando retomaron la conversación, Garavano se comprometió a seguir de cerca la investigación sobre este femicidio.
Garavano le advirtio a los padres de Lucía que "les van a querer sacar dinero".
La justicia investiga la posibilidad de que haya un tercer implicado en el asesinato de la adolescente que fue drogada, violada y torturada en una vivienda de Mar del Plata
Los padres de la víctima también se reunieron con la fiscal y pidieron testigos para avanzar en el esclarecimiento del crimen.
La Justicia cotejará tres preservativos para saber si hubo un tercer implicado.
La joven de 16 años fue asesinada el fin de semana y luego fue llevada a un centro asistencial de Playa Serena, donde los atacantes la dejaron después de lavar el cuerpo para intentar que la muerte sea atribuida a una sobredosis.
Fuentes judiciales informaron que se cotejará el ADN de los dos imputados con tres preservativos que se encontraron en la vivienda de uno de los detenidos, a fin de establecer si hubo un tercer hombre en la escena del crimen.