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El pasado 22 de noviembre, la gobernadora de la provincia de Buenos Aires, María Eugenia Vidal, visitó la Unidad Penitenciaria 48 del partido de San Martín, donde se organizó un equipo de rugby como parte de un programa de reinserción social de los presos.
María Eugenia Vidal visitó el penal de San Martín.
La ex vicejefa del Gobierno porteño estuvo acompañada por el ministro de Justicia bonaerense, Gustavo Ferrari, y el subsecretario de Políticas Penitenciarias, Juan Baric. La mandataria recorrió el pabellón 8 y el patio del centro de detención situado en la localidad de José León Suárez.
En el penal de San Martín 45 internos de entre 20 y 35 años de edad conformaron un equipo bautizado como “Los Espartanos”, coordinado por el ex jugador Eduardo Oderigo, el mismo que fue noticia días atrás por el noble gesto del sobrino de Béccar Varela. Por esta razón, Vidal aprovechó la oportunidad para conocerlos y sacarse fotos con ellos.
El gesto de la gobernadora que llamó la atención.
Fue entonces que la gobernadora bonaerense aceptó capturar el momento con los miembros de Los Espartanos y posar con un inusual gesto con sus manos que algunos tildaron de “tumbero”, pero que se asocia más a un signo al mundo del hip hop. El símbolo en sí se trata de posicionar juntos el dedo del medio, índice y anular de una sola mano.
Vidal junto a Eduardo Oderigo, el coordinador de Los Espartanos.
Según pudo averiguar BigBang, este gesto que mostró Vidal y los internos antes las cámaras significa “El Oeste”, lugar de dónde proviene la gobernadora de la provincia. Vale aclarar que María Eugenia Vidal, pese a haber nacido en el barrio porteño de Flores, reside en la brigada aérea de Morón, precisamente en el oeste del Conurbano bonaerense.
La visita de Vidal a los rugbiers del penal de San Martín
El ministro de Justicia bonaerense Gustavo Ferrari destacó que la gobernadora de la provincia de Buenos Aires intenta “avalar y promover con esta visita el trabajo arduo, tratando de, a través del deporte, lograr que las reglas del juego que se establecen sean también reglas de la vida”.
A su vez, el funcionario manifestó su voluntad de que “este testimonio de vida, de conducta, esta reconstitución del vínculo con la sociedad que se da a través del deporte, los podamos difundir en todas las cárceles de la provincia de Buenos Aires”.
La camiseta firmada que se llevó Vidal como regalo.
Y en ese sentido, reconoció que el gobierno tiene que trabajar por los derechos humanos de estas personas y, al mismo tiempo, devolverlas a la sociedad con su vínculo reconstituido.