24 Junio de 2020 17:04
Se presentaron siete proyectos en el Congreso para debatir una ley de inclusión y cupo laboral para travestis, transgénero y transexuales en la Argentina. Además de buscar establecer un cupo que va del uno al dos por ciento, se promueven beneficios fiscales para la actividad privada.
Pero las políticas de inclusión no son sólo números, son una necesidad. Detrás de cada proyecto y estadística hay una historia de vida, una persona, un derecho no garantizado. A continuación, la columna de opinión de Valeria Licciardi: "Queremos travajar".
Queremos travajar
La vida nos impone una multitud de cosas: el lugar donde nacemos, la familia con la que crecemos, el territorio que habitamos, la pobreza, los recursos, las enfermedades y las limitaciones del cuerpo. Son muy pocas aquellas cosas que podemos elegir.En mi caso, me siento afortunada; fui cuidada, alimentada y motivada a tener mi propia vida. Pude terminar mis estudios, no me echaron de mi casa y tampoco tuve que prostituirme para poder comer. Pertenezco a ese diez por ciento del total de población travesti trans que puede pensarse en otro recorrido que no sea el de la exclusión. Por lo general, las historias que se cuentan son otras; vienen de familias de contextos muy difíciles. La discriminación y la violencia son constantes al punto que se ven forzades a abandonar sus hogares.
En la última encuesta publicada por "La revolución de las Mariposas" -libro editado por la Asociación Infancias Libres que lidera Gabriela Mansilla-, el 94 por ciento de la población travesti trans ingresa a la prostitución; de ese total, el 80 por ciento es menor de edad. ¿Qué pasaría si una nena de entre 11 y 18 años que no es trans ingresa a la prostitución? ¿Qué sucede con les ciudadanxs que ven a esa travita parada en la esquina? ¿Quién protege a esas infancias? ¿Dónde están los derechos del niño?
Mientras tanto, la sociedad se sigue haciendo la misma pregunta: ¿por qué las travestis trans se dedican a la prostitución? Se enroscan con este cuestionamiento, como si desconocieran la respuesta y muchas veces prefieren quedarse con esa pregunta que les resulta más cómoda y les da tranquilidad. Hay que empezar a preguntarse otras cosas, como por ejemplo: ¿tomarías a una persona travesti trans? ¿Dejaría que cuide a tus hijes? ¿La llamarías para atención al público? ¿Qué pasaría si el o la profesional que atiende te atiende la boca o te cura una herida es una persona travesti trans?
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La falta de oportunidades y discriminación trajo como consecuencia que el único medio de subsistencia para la comunidad travesti trans sea la prostitución. No podemos permitirnos como sociedad condenar a las nuevas generaciones a que no puedan elegir. Cuando hablamos de "travesticidio social" o de genocidio trans estamos haciendo referencia a una condición histórica que sufre el colectivo. Esto es una situación de emergencia y necesitamos no sólo una Ley de inclusión laboral a nivel federal para que en todo el país haya posibilidades de ingreso a un trabajo formal, sino también como dice Susy Shock: "Tenemos que estar preparados para abrazar a ese ninx que nos dice: 'No quiero esto, quiero eso otro'".
Las personas trans circulamos en ciertos lugares. Nos ven en la tele, quizás en la calle comprando en un supermercado, pero necesitamos abrir más espacios; no sólo para poder circular, sino también para poder ser ocupados. El hecho de ser travesti trans no debería negarnos ningún trabajo en sí mismo.
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Esta es una nueva instancia, pensemos más allá de los cupos. Hablemos de paridad de género, de inclusión laboral y desenmascaremos la palabra meritocracia que predica el "si vos querés, vos podés"; porque es mentira. No existe responsabilidad individual sin responsabilidad social y no es nada cuando los gobiernos no asumen sus responsabilidades.
Cuando muchas travestis trans entran al Estado, le cambia la vida a una sociedad"
Necesitamos personas travestis trans trabajando en el Estado. Como decía Lohana Berkins: "Cuando una travesti entra al Estado, le cambia la vida a esa travesti. Cuando muchas travestis trans entran al Estado, le cambia la vida a una sociedad".