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Revolución de Mayo: 5 curiosidades que no conocías

¿Cómo estaba el clima? ¿Había paraguas? ¿Cuántas personas asistieron? Mitos y verdades de un día histórico.

25 Mayo de 2017 05:20
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Esta jornada se vuelve a cumplir un nuevo aniversario de la destitución del virrey Baltasar Hidalgo de Cisneros y su reemplazo por la Primera Junta de gobierno. La historia ya fue escrita y todos saben lo que ocurrió aquel 25 de mayo de 1810. Sin embargo, hay cosas que los libros no cuentan, por lo que BigBang decidió enumerar algunas curiosidades de la época.

Sabías que...

Tres de los nueve miembros de la Primera Junta no nacieron dentro de los límites actuales de la Argentina. Cornelio Saavedra nació en Hacienda de la Fombera (Potosí), hoy Bolivia; y Domingo Matheu y Juan Larrea eran españoles, oriundos de Cataluña.

"La Revolución de Mayo", óleo de Francisco Fortuny, 1942. 

Todavía hoy en día se discute si realmente llovió aquel día. La presencia en la Plaza de cientos de personas, que en realidad no habría sido tal, ilustradas con sus paraguas en los libros y maquetas no serían de todo ciertas. En realidad, el mal clima existió. El viento y la lluvia constante habrían hecho que la gente se retirara de la plaza.

Los que decidieron quedarse se protegía bajo los aleros de las casas y galerías aledañas. ¿La razón? Muchos historiadores sostienen que no habían paraguas y otros aseguran que existían algunos pocos traídos desde Londres, aunque estaban en manos de la gente de clase alta de la época, aquella que más pudo acercarse al Cabildo.

Algunas cosas no sucedieron como lo marcan los libros de historia. 

No todo el mundo pudo concurrir al Cabildo Abierto. Los únicos autorizados -además de los políticos y militares- eran los vecinos casados, afincados y arraigados en Buenos Aires. En total se reunieron alrededor de 200 personas.

Los paraguas no estaban al alcance de todos. 

La mujer ocupaba un lugar subordinado en la sociedad. Solo tenía tres oportunidades para salir de su casa: el bautismo, el casamiento y su entierro. Pese a esto, un grupo de damas que conocían los secretos de la revolución desde hacía tiempo estaban en la Plaza de la Victoria, mezcladas con la multitud. Juana Azurduy , por ejemplo, se puso al frente de la batalla.

El 25 de mayo de 1810 se formó un nuevo gobierno. 

Muchos libros de historia y versiones sobre la época sostienen que al quedar constituida la Primera Junta, sonó “con fuerza” la Campana del Cabildo. Sin embargo esto nunca sucedió. Cuando fue utilizada el 1° de enero de 1809, Liniers y Saavedra mandaron a quitarle el badajo, que recién fue repuesto después de 1810.