por Noa Liberman
26 Noviembre de 2022 07:00Los mitos sobre la sexualidad son una problemática que continúa hoy en día y están ligados principalmente a la falta de información y de herramientas. Uno de los motivos de esto, es el incumplimiento de la ley 26.150, que establece la educación sexual integral (ESI).
Florencia Salort es una médica recibida en la Universidad de Buenos Aires con diploma de honor; especializada en ginecología y obstetricia. Además, se especializó en psiconeuroinmunoendocrinología y actualmente, además de atender en el Hospital Italiano, se dedica a la comunicación social. Por un lado, es creadora de contenido en sus redes sociales, en donde interactúa con sus seguidores y es conocida como FlorDeGineco; pero también protagoniza una obra en el multiteatro de la mano directiva de Fabián Vena.
Es por esto que, según explica la ginecóloga, el sexo anal se convirtió en una práctica vinculada al dolor y los estigmas sociales; por lo que pocas veces se piensa si de verdad hay o no un deseo de llevarlo a cabo.
"Sigue siendo un mito que 'deberíamos hacer' y no nos animamos. Y no hay ninguna práctica que uno debería hacer. Las prácticas sexuales son libres. Hay gente a la que le gusta y gente a la que no. Según mis estadísticas, el 51% de la gente realizó sexo anal y el 49% no lo hizo; o sea está mitad y mitad. La realidad es que a mucha gente no le gusta y a mucha otra le fascina hasta más que el sexo vaginal u oral. Y hay otra gente que no quiere probar por medio, por desinformación, porque lo hizo una vez y tuvo una mala experiencia", advierte.
Viaje al orgasmo femenino: masturbación, las trabas psicológicas y el tabú social del goce
La falta de información también se vincula a la salud, la higiene y a la manera de llevar adelante dicha práctica; que si no se realiza con cuidado y respeto, puede tener consecuencias negativas en lo que al físico respecta."Hay muchas cosas que se desconocen del sexo anal, como el deseo real que una o uno tiene que tener para dar ese paso, que necesita de tiempo, relajo y confianza. Siempre la persona receptora es la que maneja el ritmo: la que dice pará, vení; hastá acá, ahora".
"El sexo anal no tiene que doler para que se pueda disfrutar. Hay que ir muy despacio. El ano no tiene lubricación propia, por lo tanto hay que utilizar gel lubricante y masajear las zonas periféricas muy de a poquito. Incluso, se pueden usar juguetes sexuales para estimular o dildos específicos; no hay que hacerlo con ningún artículo del hogar, ni frutas, ni cosas raras porque el ano, no así como la vagina, chupa todo y puede succionarlo. Y, en el caso de quedar dentro del recto, se convierte en una complicación grande", afirmó Salort.
Otro punto importante para tener en cuenta, educar e investigar, es la importancia de utilizar preservativos en el sexo anal, ya que es un área muy contaminada y muy delicada. "El recto está lleno de mucosas y de vasos, por eso es la práctica más infectiva y con mayor posibilidad de transmisión sexual que cualquier otra, la máxima. Entonces siempre hay que hacerlo con preservativo, absolutamente siempre. Con geles lubricantes acuosos y no con vaselina. De apoco, con confianza, con deseo, y con consentimiento", confirmó la especialista.
Florencia reveló que una de las cosas que más le pregunta la gente es sobre este tema. Le comunican que por ahí no les atrae dicha práctica, pero la pareja de la persona se lo pide y se siente exigida. También comentó que le piden consejos para saber cómo hacer para que no les duela.
Otro aspecto que le preguntan mucho es sobre el uso de los enemas, los cuales la médica afirmó que ahora ya no se usan, pero que antes sí porque generaba “vergüenza” manchar al otro con materia fecal. En cuanto a las hemorroides, no hay contraindicaciones salvo que sean complicadas y sangrantes.
Abuso sexual infantil: cómo detectar, ayudar y acompañar a las víctimas
"Para mí el sexo anal sigue siendo tabú. Pero para mí el placer en el sexo es tabú. Tenemos mucho para disfrutar, para relajarnos, para pedir lo que nos gusta y muchas veces no sabemos lo que nos gusta. El 30% de las mujeres nunca se masturbó, entonces quizás en una pareja de 20 ó 30 años no tiene ni idea lo que le gusta a la otra. Pero me parece que los gustos sexuales van cambiando en nuestra vida y tenemos que probar todo lo que queremos probar y abrirnos a la experiencia con relajo, con consentimiento".Por último pero no menos importante, Florencia indica que mientras haya consentimiento no hay nada que esté mal. "En el sexo todo es normal siempre que una y las personas que participen estén de acuerdo. Todo tiene que dejar de ser un tabú, hay que hablar y falta mucho todavía para poder deconstruir que el placer no es solamente cuidado de infecciones, de no violencia, sino que es pasarla bien y es un derecho humano".
Cabe destacar que debido al fuerte apoyo de sus seguidores y a lo interesante que es su show, la ginecóloga tuvo que agregar una función para el 30 de noviembre ya que las primeras dos estuvieron llenas. Esta será la última del 2022 y las entradas se pueden comprar a través de Platea Net.